
Latinoamérica ha experimentado el mayor crecimiento de demanda energética a nivel mundial desde el año 1990, una evolución que Gas Natural Fenosa ha sabido aprovechar con eficacia. Prueba de ello es que esta zona representa un importante porcentaje del beneficio bruto de explotación (ebitda) del grupo.
La región constituye uno de los pilares del plan estratégico de la compañía hasta 2020. Y según explicó su presidente, Isidro Fainé, en la última junta de accionistas, Latinoamérica "ofrece una gran oportunidad comercial para muchas empresas europeas, y especialmente las españolas".
En este contexto, Gas Natural Fenosa impulsará su crecimiento en la región a través del negocio de redes y generación. Además, las nuevas líneas de trabajo de la empresa se centrarán en capturar el potencial de crecimiento orgánico de Latinoamérica, captar oportunidades para consolidar nuevas concesiones y crecer en Puerto Rico y Perú, así como desarrollar nuevas concesiones en México y Chile. Asimismo, la compañía también trabajará en desarrollar infraestructuras eléctricas que permitan absorber el esperado aumento de demanda en Panamá y Chile.
Según explican sus responsables, la compañía ha activado cuatro principales palancas para la creación de valor en Latinoamérica: "Vocación por realizar las inversiones necesarias para acompañar al crecimiento de la demanda de la región; crecimiento de negocios de distribución y comercialización; impulso de los negocios no regulados; y la excelencia operativa". Adicionalmente, Gas Natural Fenosa realiza su actividad en Latinoamérica, en un marco de "fuerte compromiso con la responsabilidad social corporativa".
Salto en México
Uno de los objetivos en los que la compañía lleva trabajando años es en la oferta de un servicio de calidad a los consumidores. "La diversidad y el alto volumen de clientes en la región -más de 10 millones- exigen un servicio dinámico y sofisticado, lo que ha llevado a que Gas Natural Fenosa presente un elevado nivel de satisfacción por parte de los clientes".
Es de especial relevancia la apuesta por México. "Estamos muy interesados en ayudar a que este país dé un salto de calidad importante en su desarrollo", ha remarcado el propio Fainé. Y es que es necesario desarrollar nuevas infraestructuras energéticas debido a la concentración creciente de población urbana y los altos niveles de construcción de viviendas, y mejorar la calidad de suministro y la seguridad.
Para la compañía, la reforma energética que ha afrontado México es un catalizador de inversiones y crecimiento muy interesante. De ahí que una de sus prioridades haya sido participar en la mayor liberalización del mercado de gas natural en México. Asimismo, el grupo busca entrar en nuevas zonas de distribución del país, donde existe un gran potencial.
Estabilidad en Argentina
Por otro lado, en la última junta de accionistas el consejero delegado, Rafael Villaseca, resaltó el cambio de tendencia de Argentina, ya que después de diez años de una situación de inseguridad jurídica notable, el Gobierno de este país aprobó en marzo el incremento de las tarifas y el nuevo marco regulatorio que pone fin a una situación transitoria.
Especial mención requiere el negocio de distribución eléctrica en Colombia. La compañía, durante los últimos seis años, ha estado negociando con las autoridades para encontrar una solución al problema de fraude y morosidad. No obstante, los movimientos jurídicos del gobierno colombiano situaron a la empresa primero en intervención y luego en liquidación.
En consecuencia, según explican sus responsables, Gas Natural Fenosa se ha visto obligada a presentar una demanda frente al Uncitral, el organismo de arbitraje de las Naciones Unidas, con el objetivo de recuperar la compañía. Si bien, se sigue "negociando y tratando de encontrar una solución razonable al problema". Como afirmó recientemente Fainé, "nuestra intención es estar en Colombia. Ya estamos allí con gas natural, nuestro propósito es estar en el país y solucionar un problema que viene de sus orígenes".
Por otra parte, cabe destacar la nueva regulación de la distribución en Chile, que incentiva la expansión del gas natural. Además, el pasado ejercicio Gas Natural Fenosa se adjudicó un contrato a largo plazo de generación de electricidad de 324 megavatios con un mix de tecnología eólica y solar.
En Perú, la compañía espera un crecimiento significativo con la expansión del gas natural. Y, por último en Brasil, se ha adjudicado el proyecto solar Ready to Build de 60 megavatios, con un contrato de venta de electricidad a largo plazo. Además, la liberalización del mercado del gas en los próximos años le ofrecerá otra gran oportunidad.