Repsol ha presentado a la Comisión Nacional de Valores Argentina una petición para retirar sus títulos del país tras 20 años y la expropiación de YPF. La petrolera que vivió una encarnizada guerra con el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner da así el paso definitivo para dejar este mercado.
La cotización de sus acciones rondaron los 630 pesos cada título y apenas se negociaron del orden de 300 títulos. Los tenedores de acciones de la petrolera podrán mantenerlos a través de la Caja de Valores sin necesidad de transferirlos a un depositante extranjero.
Repsol también propone que de manera alternativa a quienes prefieran desprenderse de sus títulos con posterioridad puedan hacer uso de un procedimiento no obligatorio y voluntario para facilitar la venta de esos títulos en el mercado español a través de BBVA Banco Francés.
La compañía española se hará cargo de todos los gastos y costos en los cuales deban incurrir los tenedores argentinos para la intermediación y venta de sus acciones en el mercado español durante el plazo de 3 meses a partir de la fecha en que se haga efectiva la retirada de la cotización. Vencido dicho plazo, y por un plazo adicional de 9 meses, los tenedores de acciones en Argentina podrán continuar vendiendo sus acciones en el mercado español a través de BBVA, pero asumiendo éstos los gastos y costes por la intermediación y venta de sus acciones en el mercado español.
Por otro lado, el tribunal del EEUU debe decidir en estos días el resultado de la demanda de Burford contra el Gobierno argentino por la expropiación de YPF. El fondo Burford compró el pleito a la familia Eskenazi, antiguos socios de Repsol.