
El consejo de Nuclenor volvió a reunirse el pasado 29 de mayo de un modo mucho más discreto que en su encuentro anterior. Endesa e Iberdrola, esta vez, tenían prevista una reunión ordinaria para analizar la situación de la central burgalesa pero según indicaron fuentes conocedoras, al igual que en el encuentro del pasado 26 de abril, la reunión entre ambos accionistas volvió a ser tensa. Nadal ve difícil acordar con el PSOE vías para intervenir en cierres de nucleares.
En el encuentro de abril, Endesa solicitó informes jurídicos y económicos adicionales al informe de PWC presentado por Iberdrola y los administradores de la compañía acudieron con ellos a la reunión, lo que provocó una nueva petición de información de Endesa.
Con todos estos informes sobre la mesa, el consejo evitó tomar decisiones sobre el futuro de la central manteniéndose así la situación de bloqueo aunque ya se están planteando si puede existir una actuación en contra del interés social de la propia empresa.
Iberdrola, según indicaron otras fuentes, quería convocar una junta de accionistas para tratar las alegaciones a presentar por parte de la empresa pero Endesa se negó a aceptar esta convocatoria hasta que el ministerio decida abrir el plazo de alegaciones correspondiente.
El Ministerio de Energía se prepara para abrir dicho plazo de consultas sobre la central nuclear de Garoña. Según indicaron fuentes del Ejecutivo, la decisión se tiene que tomar este mes de junio. Posteriormente, se da un plazo de tres semanas para poder presentar las alegaciones de cada parte.
Una de las dudas existentes en este momento es si el Ministerio dará a conocer previamente su propuesta de resolución. Es decir, si plantea que se abra la central y con cuantos años de vida o por contra defiende su cierre a tenor de que la planta no podría estar disponible al menos hasta 2019. El Gobierno considera que su resolución final podría retrasarse algo más de agosto para que todo el mundo tenga tiempo para realizar sus comentarios ya que no hay un plazo cerrado definitivo.
Según indicaron fuentes de Energía, la información ha sido ya remitida a todas las partes que se han mostrado interesadas, entre ellas, dos organizaciones ecologistas, las diputaciones, las comunidades autónomas afectadas, así como un sindicato. El secretario de estado de Energía, Daniel Navia, prevé que entre este martes y miércoles se publique en el Boletín Oficial del Estado la Orden ministerial que permite retrasar los plazos para pedir la autorización de explotación de la central un año antes, es decir, vinculada a la aprobación de Ley de Cambio climático y transición energética.
Energía ha mantenido ya contactos con Almaraz para informarles del cambio, ya que era la central que más pronto tenía que presentar su petición de renovación de licencia. Con este escenario, los titulares de Almaraz, Vandellós o Cofrentes ganan tiempo hasta que se apruebe la nueva planificación energética para decidir el futuro de las plantas.
Fuentes consultadas indicaron que Almaraz ya tiene lista toda la documentación para presentarla en el Consejo de Seguridad Nuclear el próximo 8 de junio.
Por otro lado, el lunes Bloomberg aseguró que Iberdrola estaba dispuesta a buscar comprador para sus activos nucleares en España o a incorporar un socio a los mismos para poder centrarse en el negocio renovable. La eléctrica indicó que no hay nada sobre ese asunto en estos momentos ya que tiene en pérdidas este negocio.
El ministro de Energía, Álvaro Nadal, ha dejado claro en las últimas semanas que considera a este tecnología imprescindible para los próximos años y el secretario de estado, Daniel Navia señaló en unas jornadas organizadas por elConfidencial que hay que decidir si en siete u ocho años se prescinde del 20% de la generación nuclear del país o si se extiende la vigencia de esas instalaciones, un debate que ha dicho que hay que hacer "con luz y taquígrafos", analizando muy bien los costes, para llegar a un consenso.