
Cada punto porcentual que las energías renovables incrementan su cuota en el mix de generación de la UE, el precio del mercado mayorista de la electricidad baja en 0,4 euros por MWh; y al contrario, por cada 1% que sube la presencia de los combustibles fósiles -gas, carbón y petróleo-, el precio de la luz sube entre 0,2 y 1,3 euros por MWh.
Así lo indica un informe elaborado por la Comisión Europea sobre los precios y costes de la energía en Europa que forma parte del Paquete legislativo presentado la semana pasada para fomentar el peso de la generación limpia y la eficiencia energética en las economías de los socios comunitarios y reducir con ello las emisiones de CO2.
El documento llama la atención sobre el coste de las importaciones energéticas de los 28, que ascendieron a 261.000 millones de euros en 2015, un 35% menos que en 2013, por la caída de los precios de los combustibles fósiles y sus derivados en los mercados internacionales. Esta bajada ha incrementado el PIB de la UE un 0,8% en 2015 y se espera que lo haga un 0,5% al cierre de 2016.
Suben las tasas y otras cargas
La Comisión analiza los cambios en los distintos componentes del precio de la electricidad: el energético, las redes, y los impuestos y otros elementos que se cargan sobre el recibo, como las ayudas a las renovables, los subsidios a los pobres, el apoyo a la industria nuclear, a la eficiencia energética, a la innovación...
Los precios de los mercados mayoristas han bajado un 70% desde 2008 y un 55% desde 2011, alcanzando este año los niveles más bajos en más de una década. Ahora bien, esta caída no se ha trasladado en la misma medida a los consumidores y la Comisión lo achaca a una insuficiente competencia.
En el caso de los consumidores domésticos -el precio medio final del MWh en la UE es de 208,7 euros- el componente energético sólo ha bajado un 15% desde 2008. Y en el caso de los consumidores industriales, la bajada ha sido del 2,8% anual entre 2008 y 2015.
En relación a las redes eléctricas, los consumidores domésticos pagan un 3,3% más que en 2008, casi el mismo incremento que los industriales: un 3,2%.
En el tercer bloque es donde se registra un fuerte incremento: en el caso doméstico, de un 28 a un 38%, y en el caso industrial, del 12 al 32%, si bien el estudio avisa de que aquí los datos no son todo lo completos que debieran, al aplicar diferentes sistemas de cálculo.
En cualquier caso, como el IVA se devuelve a las empresas, éstas pagan una media de 34 euros por MWh en impuestos y otras cargas, mientras que los hogares desembolsan 79 euros por MWh.
De los distintos componentes de este bloque, la mayor subida es para las renovables y la cogeneración, que pasa de suponer el 14% en 2008 al 33% en 2015.