Energía

Cataluña perderá la nuclear con sus reactores a la mitad de su vida útil

  • Concentra tres de las siete centrales del país, que generan casi el 60% de la energía de la comunidad
Central nuclear de Ascó. ALAMY
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"Cero accidentes". Este es el lema que lleva por bandera la Asociación Nuclear Ascó-Vandellós II (ANAV). "La seguridad será siempre nuestra principal prioridad, hasta el último día que se nos permita operar y en las fases posteriores al cese de la actividad", recalcan desde la organización, participada en un 85% por Endesa y un 15% por Iberdrola. Es decir, las eléctricas son las dueñas, pero ANAV se encarga de la gestión de los reactores.

En concreto, opera tres de los siete que hay actualmente en marcha en España, con una potencia instalada conjunta de tres gigavatios (GW). Son los de Ascó I, Ascó II y Vandellós II, ubicados en la provincia de Tarragona y que cubren más de la mitad de la demanda energética de la comunidad autónoma. En total, estos tres generaron en 2024 22,2 teravatios hora (TWh), lo que supone el 59,1% de la energía eléctrica producida en Cataluña y el 50,3% de la consumida.

"Cataluña no puede cerrar las nucleares. Si acaban cerrando, volverá a la Edad de Piedra", afirma Ignacio Araluce, presidente de Foro Nuclear, la patronal que representa al sector. En una visita con periodistas, Paulo Santos, director general de ANAV, desgrana los números de las centrales en la región.

La central nuclear Ascó está situada en el municipio homónimo de Tarragona, en el margen derecho del río Ebro. Está compuesta por dos unidades, cada una funciona mediante un sistema nuclear de producción de vapor formado por un reactor de agua ligera a presión, del tipo PWR, suministrado por la empresa norteamericana Westinghouse de EE. UU.

En concreto, el 13 de agosto de 1983 se sincronizó por primera vez a la red eléctrica la unidad 1, aunque la operación comercial no se inició hasta el 10 de diciembre de 1984, la primera fecha marca el inicio de la vida operativa de la planta, de acuerdo al criterio establecido por el Consejo de Seguridad Nuclear. Es por ello que el pasado 13 de agosto de 2023 Ascó I cumplió los 40 años de operación, un hito que marca, al mismo tiempo, la entrada de la planta en la denominada operación a largo plazo.

De no modificarse el calendario de cierre nuclear en España firmado en 2019 entre el Gobierno y el sector, Ascó I dejará de funcionar en octubre de 2030, es decir, con un total de 46 en funcionamiento. Santos advierte de que tanto Ascó I, como Ascó II y Vandellós II están diseñadas para alcanzar una vida útil de hasta 80 años. De su lado, el grupo dos opera en la red desde 1986 y cerraría dos años más tarde, en 2032.

Integración en el entorno

La integración de la central en su entorno se ha ido consiguiendo gracias a la fiabilidad y seguridad de su operación a lo largo de estos años, así como con la colaboración de la propia instalación en actividades de interés general promovidas por las entidades culturales y deportivas de la comarca.

En la misma línea, en los terrenos de los alrededores de la central (propiedad de la misma) se han seguido cultivando, vid, aceite, frutales, etc. Junto a ello, en noviembre de 2011, Ascó inauguró un nuevo centro de información como un espacio abierto al público, interactivo y divulgativo donde se muestra la operación de la central y la energía nuclear en general.

De su lado, Vandellós II, que se empezó a construir en 1981 por la compañía Copisa, alcanzó su operatividad comercial el 8 de marzo de 1988. Está situada en el término municipal de L'Hospitalet de l'Infant, a orillas del mar Mediterráneo. La participación nacional en la construcción y suministro de equipos representó más del 89% del total, lo que significa el porcentaje más alto logrado en nuestro país para este tipo de proyectos. Tiene programado el cierre para 2035. Vandellós II entrará en parada de octubre a diciembre de este año para efectuar su vigesimoséptima recarga de combustible.

Tecnología mundial

Los tres reactores comparten tecnología, conocida como PWR (Pressurized Water Reactor), la más común en el sector nuclear, que utiliza elementos con dióxido de uranio enriquecido al 3-5% como combustible. De los 442 reactores actualmente en operación en el mundo, 299 son de tecnología de agua a presión –pertenecientes a la denominada Generación II–, tanto de diseño estadounidense, alemán, francés y sueco (PWR) como de diseño ruso –anteriormente soviético– (VVER), lo que representa más del 67 % del total, según Foro Nuclear.

"La tecnología de agua a presión seguirá siendo dominante en las próximas décadas", señalan desde la patronal. España tomó la decisión de apostar por la nuclear ante la creciente demanda de energía eléctrica durante los años 60 y 70. Fue pionera en el mundo.

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