
El fondo Atlas Holdings redobla su apuesta por Ence. Según notificó la Comisión Nacional de los Mercados de Valores (CNMV), la entidad estadounidense ha incrementado del 3,23% al 5,07% su capital en la compañía de energía y celulosa española. En este sentido, el fondo aumenta de 7,95 millones a 12,48 millones los títulos en propiedad de la firma que preside Ignacio Colmenares.
Con estos mimbres, Atlas se convierte en uno de los principales inversores en el accionariado de Ence, que se ha convertido en uno de los más movidos de las cotizadas energéticas en los últimos meses. Después de las compras de Víctor Urrutia, la mayor fortuna de Álava, que acumula una inversión de 18,4 millones de euros desde el verano que lo han colocado como el segundo mayor accionista, con el 10% del capital.
En primer lugar, se sitúa Juan Luis Arregui, presidente de honor de Ence, con el 29,4%. La tercera posición la ocupa Jose Ignacio Comenge, con el 6,37%, y en cuarta posición se sitúa ahora Atlas, que cuenta con más de 6.000 millones de dólares bajo gestión en compañías privadas y en cotizadas. La compañía afloró el pasado diciembre una participación del 3,23% en Ence.
Estrategia de negocio
Ence se encuentra en proceso de despliegue de su plan de crecimiento y diversificación, en el que busca elevar el margen de sus productos de celulosa, mientras mantiene el desarrollo de su cartera de renovables con el foco puesto en la energía térmica y el biometano.
La compañía es un actor destacado en la producción de celulosa de eucalipto y prevé que el 30% de sus ventas de celulosa en 2025 procedan de sus productos especiales, es decir, de la línea Ence Advanced, que cuentan con mejor margen que la celulosa estándar. El objetivo de la compañía es superar el 50% de las ventas totales de celulosa en 2028.
El pasado mes de diciembre, Ence anunció que había adquirido su primera planta de biometano con el fin de impulsar la creación de una gran plataforma en España. En concreto, la compañía cerró la adquisición de una planta de generación de biometano en el municipio de La Galera (Tarragona). La instalación, que se extiende a lo largo de cinco hectáreas, está diseñada para producir hasta un máximo de 50 GWh de biometano al año, con sus correspondientes certificados de sostenibilidad. De esta forma, la compañía camina firme hacia la producción de 1.000 GWh en 2030 y cuenta ya con una cartera de 28 proyectos.