El sector dedicado al despliegue del hidrógeno verde en España se encuentra en plena resaca por el éxito rotundo de la primera subasta del Banco Europeo del hidrógeno. La Comisión Europea adjudicó a finales de abril casi 720 millones de euros a siete proyectos de hidrógeno renovable en Europa, entre ellos, tres españoles y dos portugueses. En este contexto, el sector se plantea en el III Foro Empresarial Hidrógeno verde y gases renovables organizado por elEconomista.es cuál será el siguiente paso de gigante, algo que pasará por escalar la demanda y la oferta de hidrógeno para reducir costes y que los proyectos pequeños con dificultades para salir adelante puedan salir al mercado.
Así lo cree Joan Batalla, presidente de Sedigas, que asegura que es el gran reto de los próximos años. Como también lo es conectar la oferta y la demanda, articular el papel que jugará la infraestructura para transportar el hidrógeno y cómo usar de manera eficiente los valles verdes del hidrógeno, sin olvidar que existen otros gases renovables con potencial, como el biometano. "Esta opción nos permite descarbonizar y, además, dar respuesta a la gestión de residuos en España, generando al mismo tiempo oportunidades de riqueza y empleo", afirma Batalla.
No obstante, es necesario pasar del dicho al hecho. Juan Cano, Head de FRV-X, explica que queda aún mucho por hacer y quedan muchos interrogantes por resolver, pero que lo principal es pasar a la acción. "Hay que pasar de Power Point a Power Plant", resume. La firma de Cano cuenta, solo en España, con dos proyectos de hidrógeno, entre los que se encuentra el el proyecto Kaminoan que proporcionará una capacidad de producción de hidrógeno ecológico de hasta 20 MW, por lo que el directivo de FRV-X pide que se avance en "cristalizar" proyectos.
Mayte Nonay, directora de Estrategia y Planificación de Enagás, afirma que, al menos, los grandes proyectos estratégicos que aspiran a colocar a España como el gran 'hub' europeo del hidrógeno verde sí que avanzan. Es el caso del H2MED, la 'megainfraestructura' que conectará Portugal y España con el resto de Europa a través de Marsella. En este sentido, Nonay afirman que los proyectos "van para adelante" y que ya se ha asignado la ingeniería básica para la obra. Desde Enagás auguran que esta infraestructura llevará la demanda a los puntos que lo necesiten y que "pondrá en el mapa" a España como uno de los grandes núcleos de energía limpia del continente.
Los ponentes afirman que existe viabilidad para desarrollar más el combustible renovable y que los grandes proyectos insignia que impulsan el auge del sector están despegando. Ahora bien, Ana María Vidaurre, responsable de Alianzas Estratégicas y Bancabilidad de Hidrógeno Verde de Cepsa, advierte de que aunque las incertidumbres que rondaban el mercado energético en los últimos años se hallan "acotado"; aún existen aspectos para los que se requiere de una "alianza estratégica" para trabajar materias que afectan a las distintas empresas, como son los permisos o la mejora de la regulación.
Con todo, España sigue contando con una posición estratégica y atractiva para la inversión. José Gómez-Arroyo Bernabéu, director de Proyecto Catalina en el Copenhagen Infrastructure Partners (CIP) afirma que España es un mercado más competitivo que, por ejemplo, Alemania, con pujas a la mitad de precio que en el país centroeuropeo.
Por otro lado, el directivo del mayor gestor de fondos en renovables del mundo alerta de que los desarrollos europeos también corren el riesgo de peligrar por la ambición que ha mostrado Europa con el hidrógeno verde. "Los objetivos que nos hemos puesto son muy ambiciosos", explica. Gómez-Arroyo pone el ejemplo de la primera subasta del Banco Europeo del hidrógeno: "Los datos de la primera subasta [del Banco Europeo del hidrógeno] no son suficientes. Representarían el 1,5% de las toneladas que espera la UE, y este es el mecanismo más potente que tenemos". Es por ello, que el directivo del CIP concluye que si el bloque quiere llegar a los objetivos que se ha marcado, "va a haber que hacer más".
"El gran reto que afrontamos es captar la demanda industrial con capacidad para usar el hidrógeno"
El uso de hidrógeno lleva décadas presente en muchas industrias. No obstante, Joan Batalla comentó que el reto se encuentra en el resto de la demanda industrial, donde "surge la incertidumbre". El presidente indicó que en los encuentros que ha llevado a cabo la patronal con los diferentes actores, las grandes preocupaciones del sector se basan en el precio, cómo se llevará a cabo el proceso de transición energética y cuál es la señal de precio a medio y largo plazo: "[Las empresas] necesitan tener un horizonte para acometer las inversiones de señal de precios. Y lo vamos a ver en los próximos años". Pese a los excelentes resultados obtenidos por los proyectos ibéricos en lo que a financiación se refiere, la demanda de hidrógeno renovable "debe ser estimulada con mecanismos de apoyo que nos permitan escalar y reducir los costes de producción", explica Batalla.
Además, estos mecanismos han de sumarse a una mejora normativa que allane el camino, comentó. Estos objetivos de atraer demanda requieren de un paso previo vital para la correcta conexión entre oferta y demanda: visión a largo plazo. "Es importante ver hacia donde vamos en 10 años", ya que pese a las incertidumbres que pueda generar a corto plazo, como son los eventos bélicos o geopolíticos con capacidad para alterar de manera significativa el mercado energético, "tenemos que ver hacia dónde nos movemos como economía", concluyó.En este sentido, desde Sedigas ven la botella "medio llena" y su presidente lee la situación como un proceso en el que se han dado "pasos de gigante" y en la que han conseguido alinearse con las administraciones para desarrollar sus proyectos.
"Certidumbre, agua y viabilidad de los mercados: tres ideas clave para el futuro del combustible"
El mercado está en pleno proceso expansivo y, para alcanzar la madurez, Juan Cano opinó que hay tres factores determinantes a potenciar: la certidumbre, la viabilidad de los mercados de hidrógeno y la disponibilidad de agua. "Las moléculas no son miedosas, pero el dinero sí que lo es", resumió Cano. Un marco legal seguro facilitará que el dinero fluya y el desarrollo del mercado que "aún no existe". Sin embargo, el agua supone otro impedimento en la ecuación.
"Es una 'espada de Damocles para los proyectos' (...) y no puede ser que un plan avanzado se caiga por el agua", indicó. Por otro lado, el directivo de FRV-X cree que falta "altura de miras" y explicó que un ejemplo de buena planificación fue la planta de regasificación de Gas Natural Licuado (GNL) Musel, en Gijón, que fue criticado en su momento por considerarse un gasto innecesario y que ha demostrado ser clave para la UE tras la invasión a Ucrania.
"Hay que centrarse en la competitividad, pero también en la seguridad del suministro"
"La industria necesita ser competitiva, pero también debe de tener seguridad en el suministro", sentenció Mayte Nonay. La industria española está "acostumbrada" a un suministro seguro y constante, algo para lo que el hidrógeno verde posee gran ventaja. "Ahora mismo, la industria ve qué tecnología es más competitiva, pero también tiene que pensar qué tecnología puede aportar seguridad de suministro para poder disfrutar de ella, como la industria termointensiva y otras que utilizan materias primas para funcionar están acostumbradas".
Para este punto, la infraestructura "debe jugar un papel muy relevante", aclaró Nonay y puede llevar ese nuevo vector a la industria, lo que irremediablemente la convertirá en más competitiva. "Hay que ser conscientes de que estamos en una curva de aprendizaje, pero llegará: de la mano de la innovación y de las ayudas y a medida que tengamos señales positivas del desarrollo del mercado", subrayó.
"A corto plazo, tendremos más problemas por los tiempos de las renovables"
La industria de la molécula renovable afronta una serie de cuellos de botella para su correcto desarrollo. En el largo plazo, los ponentes concuerdan en que la agilidad para desarrollar la infraestructura de transporte de gas es el gran reto, pero a corto plazo Ana María Vidaurre cree que la red de transporte de energía y el tiempo que tardan en salir a la luz los diferentes desarrollos de renovables puede ser la barrera que más complique los planes de despliegue del hidrógeno.
"Es un arte, porque tiene que pasar todo en muy poco tiempo. La parte de infraestructura es más difícil de resolver, pero el tema de los tiempos con las renovables, que son procesos que se conocen muy bien, tardan mucho tiempo en resolverse", explicó. Cepsa será el actor principal en el valle del hidrógeno andaluz, con un centro en Palos de la Frontera (Huelva) y otro en San Roque (Cádiz) que alcanzarán 1 gigavatio (GW) de capacidad de producción, cada una.
"No me preocupa la regulación, en lo que deberíamos centrarnos es en las infraestructuras"
La agilidad de la regulación es una constante a la hora de desplegar nuevas redes energéticas, también en el caso del hidrógeno renovable. A pesar de este hecho, José Gómez-Arroyo Bernabéu estimó que la normativa tiene una importancia relativa, en tanto que puede ser modificada y las empresas del sector están alineadas con las distintas administraciones públicas a todos los niveles. Además, comentó, existen fórmulas legales que permiten que, aunque no existan leyes específicas, los proyectos salgan adelante.
Sin embargo, el director de CIP considera que el punto crítico para el correcto desarrollo de la industria del hidrógeno es la infraestructura. "Los pasos marcados en el PNIEC para instalar electrolizadores y los valles del hidrógeno tienen sentido, pero ninguno de los dos te puede permitir desarrollar un mercado del hidrógeno, con liquidez, capacidad de suministro y que identifique nuevos puntos de consumo".
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