
Iberdrola, Shell, Engie y EDP prevén competir en las próximas subastas de Massachusetts (Estados Unidos) para salvar sus megaproyectos de eólica marina. Volverán a licitar en la próxima contratación del estado algunos de sus parques ganadores en los primeros concursos offshore, con una inversión prevista de 9.000 millones de euros.
SouthCoast -empresa conjunta de Shell y Ocean Winds (EDP y Engie)- y Avangrid -filial estadounidense de Iberdrola- están tratando de negociar la rescisión de los acuerdos de venta de electricidad firmados en 2021 y 2022 con las empresas de servicios públicos de Massachusetts. Según advierten las energéticas europeas, la inflación, el aumento de las tasas de interés y los problemas de suministro han vuelto inviables los proyectos con las condiciones actuales.
Con el objetivo de salvar sus inversiones millonarias, Iberdrola y SouthCoast planean volver a licitar sus parques Commonwealth Wind (1.200 MW) y Martha's Vineyard (2.400 MW), respectivamente, en la cuarta y mayor subasta de Massachusetts hasta la fecha.
Una característica clave de l concurso es que, a diferencia de los anteriores, permitirá a los ofertantes presentar una propuesta alternativa de precios indexados, para garantizar la viabilidad de los proyectos ante un contexto de inflación. Con todo, es posible que Iberdrola, Shell y Ocean Winds tengan alguna sanción a la hora de presentar sus propuestas por el incumplimiento de los anteriores contratos.
Nueva licitación
El borrador de solicitud de propuestas para el concurso de eólica marina representa la mayor licitación jamás realizada en Nueva Inglaterra, con 3.600 MW. Esta potencia cubrirá más del 25% de la demanda anual de electricidad del estado y supondrá un aumento significativo con respecto a la adquisición anterior, que buscaba aproximadamente 1.600 MW de energía eólica offshore.
Según el cronograma propuesto, las ofertas vencen el 31 de enero de 2024. Este permite a los desarrolladores de proyectos incorporar varias iniciativas emergentes, incluida la guía anticipada del programa estadounidense sobre créditos fiscales, subvenciones para mejoras de transmisión y coordinación adicional con socios estatales regionales.
Las decisiones de las multinacionales europeas ponen en manifiesto que tanto la segunda como la tercera adjudicación de energía eólica marina de Massachusetts son un fracaso, con 2.400 MW descartados. El único parque que avanza en el estado es Vineyardn Wind 1 (800 MW), también de Iberdrola, que se espera que comience a producir energía a finales de 2023.