
Europa estuvo al borde un gran apagón el pasado 8 de enero. Según acaba de explicar ENTSOE, el organismo que agrupa a los transportistas europeos, a las 14.05 horas el gran sistema eléctrico continental tuvo que desincronizarse en dos zonas separadas para hacer frente a los problemas de la red de transporte eléctrica.
Según indica el organismo, la frecuencia en la zona noroeste de Europa continental disminuyó notablemente lo que ponía en peligro la continuidad del suministro.
Ante la baja frecuencia en la zona noroccidental, un hecho que hubiese podido provocar que se dispararan las protecciones de las líneas y se interrumpiese el suministro, se desconectaron los servicios interrumpibles contratados en Francia e Italia, en total alrededor de 1,7 GW. Estos servicios, que ya apenas existen en España, corresponden a grandes clientes que son contratados por los respectivos Operadores de Sistemas para dejar de consumir electricidad si la frecuencia de la red cae por debajo de un cierto umbral. Además, se activaron automáticamente 420 MW y 60 MW de potencia de apoyo desde las zonas nórdicas y Gran Bretaña. Estas contramedidas aseguraron que ya a las 14:09 CET la desviación se limitara a la zona noroccidental.
Debido a la gran sobrefrecuencia en la Zona Sudoriental, se activaron contramedidas para reducir la alimentación de las unidades de generación y estabilizar la frecuencia.
La respuesta automática y las medidas coordinadas adoptadas por los GRT en Europa continental garantizaron que la situación se restableciera rápidamente a las operaciones normales. Se coordinaron acciones entre los operadores de red para reconectar las dos áreas lo más rápido posible de nuevo. Por lo tanto, los servicios interrumpibles contratados en Italia pudieron ser reconectados a las 14:47 CET y en Francia a las 14:48 CET. A las 15:08 CET, ambas áreas se conectaron de nuevo a un área sincrónica en Europa Continental.
ENTSO-E ha mantenido informados a la Comisión Europea y al Grupo de Coordinación de Electricidad compuesto por representantes de los Estados Miembros.
La situación está sujeta a los resultados de una investigación detallada sobre el evento que está en curso.