
Las principales compañías energéticas de nuestro país ya tienen listo su plan de desescalada para la vuelta al trabajo, previsiblemente a partir del 11 de mayo, y que incluirán en la mayor parte de los casos la realización de test para toda la plantilla, lo que supone una cifra de casi 40.000 test.
Iberdrola prevé una reincorporación escalonada mediante el mantenimiento del teletrabajo rotativo para más de 70% de la plantilla, así como el aseguramiento de la distancia interpersonal de seguridad entre puestos de dos metros. Para ello, la compañía ha diseñado una distribución específica en cada centro. Asimismo, seguirá proveyendo de mascarillas y otros elementos de protección a los empleados que lo necesiten en el ejercicio de su trabajo.
Las medidas de protección se trasladarán a los espacios comunes, con la clausura temporal de servicios no esenciales, como es el caso de comedores, cafeterías, etc. Además, instalará mamparas en aquellos puestos de trabajo de atención al público.
En todos los centros de trabajo, se instalará cartelería y señalética con información sobre normas básicas de protección, relacionadas con el mantenimiento de la distancia de seguridad interpersonal, la recomendación del uso de escaleras, información sobre ocupación en ascensores y recomendaciones generales de higiene y protección.
Atendiendo al carácter estratégico y esencial del servicio que presta la compañía, se realizarán a la plantilla, de forma gradual, tests de negatividad del virus y nivel de defensas (serológicos); una iniciativa coordinada por el Servicio Médico de Iberdrola que mantiene los protocolos internos de actuación establecidos frente a la COVID-19.
La compañía seguirá manteniendo o, en su caso, reforzando, las medidas de limpieza y desinfección implantadas en sus centros de trabajo desde principios de marzo, así como la limitación de reuniones presenciales, visitas externas y viajes.
Iberdrola facilitará a sus empleados un documento, antes de su reincorporación, con recomendaciones de actuación desde la salida del domicilio hasta el puesto de trabajo y viceversa, con el fin de minimizar la exposición al coronavirus.
Endesa, por su parte, prevé realizar test de COVID19 a toda la plantilla, tomará la temperaturas en los accesos de los centros de trabajo. Proporcionará a todos los empleados kits de mascarillas y geles.
La jornada de trabajo será adaptada/modificada en atención a las nuevas circunstancias. De este modo, se anticipa el régimen de jornada continuada, se modifica el de teletrabajo.
Los centros de trabajo estarán preparados para recibir a los trabajadores, y la densidad de ocupación en los mismos será muy inferior a la de su dimensionamiento o capacidad real. Para ello, se instalarán mamparas en los puestos de trabajo que no guarden la distancia mínima de 2 metros.
Las sedes principales estarán sectorizadas, los circuitos de transito organizados, y el conjunto gozará de abundante señalización. Se limitarán zonas comunes y limitarán posibles situaciones de concentración de personas
La eléctrica procederá también al análisis y adaptación de los procesos formativos y dinámicas de reuniones y eventos. Se modularán los viajes y se adaptará la gestión de visitas.
Naturgy, siguiendo siempre las directrices de las autoridades sanitarias, comenzará a realizar cuestionarios sobre salud a la totalidad de la plantilla y los hará extensivos a la unidad familiar. El objetivo es detectar a aquellos empleados que hayan podido pasar ya la enfermedad y estructurar la vuelta a la normalidad con todas las garantías de seguridad y salud para sus empleados. tal y como ha explicado la compañía a su comité de empresa.
En función del cuestionario y los futuros análisis que se vayan realizando, la compañía dividirá la plantilla en grupos para afrontar su regreso a los puestos de trabajo de forma segura y paulatina y siempre priorizando el teletrabajo en aquellos puestos en los que lo permitan y aplicando, desde el primer momento, los protocolos de prevención definidos para garantizar un retorno seguro.
El último grupo en incorporarse serán los grupos de riesgo;-mayores de 60 o personal sensible por patologías previas y las embarazadas. Este plan ya ha sido comunicado a la plantilla, con el objetivo de que conozcan de primera mano el plan de desescalada y las fases para los siguientes meses.