
Renfe da el pistoletazo de salida a las huelgas del verano. CCOO ha llamado a toda la plantilla del operador ferroviario a parar el próximo 15 de julio, en plena operación salida, para forzar a la dirección a llegar a un acuerdo encaminado a mejorar sus condiciones laborales. En concreto, el sindicato reclama más empleo, menos jornada y consolidación salarial de la subida del 0,5% pactada.
La huelga, que se puede repetir en agosto si no se desbloquea la situación, coincide con el cambio de quincena en el periodo vacacional, lo que supone que se cancelarán trenes en uno de los días con más actividad en los que la firma suele reforzar el servicio.
Se cancelarán trenes en uno de los días con más actividad de julio
El paro de 24 horas se han convocado hoy, tras romperse las negociaciones con la cúpula de Renfe, por lo que hay que esperar a que el Ministerio de Fomento fije los servicios mínimos de la jornada para saber cuántos trenes se cancelarán. De todas formas, es difícil que llegue a haber un verdadero caos ya que el operador suele recolocar los pasajeros en otros trenes el mismo día o al día siguiente y porque el 15 de julio cae en lunes, por lo que el grueso de los desplazamientos se esperan para el fin de semana. Por ejemplo, el verano pasado, cuando SFF-CGT convocó una huelga, el ministerio de José Luis Ábalos dictó unos servicios minimos del 78% para elAVE y larga distancia y del 64% para media distancia por lo que apenas se cancelaron 161 trenes.
Antes de que se celebre la huelga y se fijen los servicios mínimos se tienen que suceder reuniones de conciliación para tratar de llegar a una solución. "Las conversaciones se han roto porque la empresa se niega a llegar a un acuerdo pero estamos abiertos a sentarnos a negociar en cualquier momento y resolver el conflicto", explican fuentes de CCOO a este diario. En este punto, ratifican que "no se descartan nuevas convocatorias de paros laborales durante el mes de agosto en Renfe que podrían extenderse a Adif si las negociaciones en curso sobre movilidad, empleo y externalizaciones siguen bloqueadas" y persiste "la actitud dictatorial de la empresa".
Las reivindicaciones
La reivindicación de los representantes de los trabajadores pivota sobre tres ejes. El primero tiene que ver con la aplicación de la reducción de la jornada a 37,5 horas semanales recogida en el convenio colectivo pactado este año. La empresa quiere recortar el horario 17 minutos cada día mientras que los sindicatos buscan que se acumulen los minutos y mantener el mismo horario pero a cambio tener 10 días libres más al año para mejorar la conciliación de cara a poder atender asuntos personales o cuidar de los hijos o familiares enfermos. En este punto señalan que quitar 17 minutos del área comercial o a los interventores no tiene sentido y es difícil de cumplir ya que, por ejemplo, a un interventor que duerme fuera de casa "le da lo mismo llegar 17 minutos antes o después al hotel".
"Renfe incumple las tres materias troncales en los que se fundamenta el último convenio colectivo: empleo, jornada y salario"
El segundo eje es el aumento de la plantilla, también pactado. La compañía ferroviaria ha logrado el permiso para elevar un 5% la tasa de reposición (hasta el 105%), lo que en principio aumentaría el número de trabajadores pero, según denuncian, también se ha subido un 5% el número de empleados que se pueden ir de la empresa antes de cumplir la edad de jubilación (plan de desvinculaciones), lo que dejaría en tablas la situación.
Según los datos facilitados por la empresa, el 30 de septiembre de 2018 la plantilla de Renfe es de 13.694 trabajadores, mientras que en agosto de 2017 esa cifra ascendía a 13.723. "No estamos de acuerdo con esta maniobra. Eso nos lleva a que Renfe no pueda atender, con la debida calidad, el servicio de transporte ferroviario y se incrementen las incidencias en el tráfico ferroviario", subraya Manuel Nicolás Taguas, secretario general del Sector Ferroviario de FSC-CCOO.
En cuanto al salario (tercer eje), es el hecho de que no ha incluido en la masa salarial, y por tanto no se hace consolidable, el incremento salarial del 0,5% derivado de la productividad de 2017 y 2018.
"Renfe incumple las tres materias troncales en los que se fundamenta el último convenio colectivo: empleo, jornada y salario", relata explica Manuel Nicolás Taguas, secretario general del Sector Ferroviario de FSC-CCOO.