
Factorenergía amplía su negocio de comercialización de energía para adentrarse en la generación distribuida, el autoconsumo, la eficiencia energética y la movilidad sostenible. La firma confía en estas nuevas actividades y en el crecimiento en el extranjero -está presente en Portugal y México- para alcanzar unos 1.000 millones de euros de facturación en 2024, frente a los 386 millones del año pasado.
El consejero delegado y fundador de Factorenergía, Emilio Rousaud, ha revelado esta mañana, durante un encuentro con la prensa, que la compañía -primera empresa independiente autorizada a comercializar energía en 1999- ha firmado líneas de financiación por un total de 14 millones con CaixaBank y Bankinter para facilitar que sus clientes domésticos y Pymes se instalen sistemas de autoconsumo.
La compañía, que recibe unas 450 solicitudes mensuales para instalarse equipos de autoconsumo, ofrece un servicio integral: instalación, financiación y gestión de los sistemas. Según sus cálculos, las pequeñas instalaciones se amortizan en un plazo de cuatro a siete años.
En el caso de las empresas industriales, con potencias superiores a los 100 kW, Factorenergía ha alcanzado acuerdos con varios fondos de inversión para ofrecer el 100% de la financiación: los fondos costean el sistema y al cabo de ocho a 10 años éste pasa a ser propiedad del industrial. "No es un leasing; no es necesario que las cuentas reflejen ningún endeudamiento" puntualiza Rousaud, que estima ahorros del 10% al 30%, dependiendo de la tarifa que se tenga contratada.
Movilidad sostenible
La empresa, propiedad de Rousaud, el fondo JZ Interanational y un fondo público de pensiones canadiense, también apuesta por la movilidad sostenible, tanto eléctrica -ha instalado unos 100 puntos de recarga desde 2017- como con gas (GNL y GNC), en este caso orientado al transporte pesado y marítimo.
El año que viene recibirá la energía de los parques eólicos de Enhol -de 90 MW- con los que firmó el primer contrato de compraventa de energía a largo plazo (PPA) del país, de 20 años de duración. Con ellos aumentará la cartera de productores de energía renovable -unos 3.000 en la actualidad- para los que ejerce labores de representación en el mercado.
Rousaud apunta también que está "buscando oportunidades para adquirir empresas", ya sea en España o en el extranjero -la semana pasada cerró la adquisición de la portuguesa Enforcesco-, tanto en sus negocios tradicionales como en los nuevos. La firma cuenta con 400 millones para dar el salto a otras actividades, entre las que destacan la generación de energía y la comercialización de gas.
Con las nuevas líneas de negocio, Rousaud prevé que la facturación de la empresa crezca desde los 386 millones de 2018 hasta los 1.000 millones en cinco años. De momento, para este 2019 espera un "crecimiento mínimo del 20%", tras haber atravesado lo que denomina "un período de contención y estabilización".