
Repsol y Confortauto han firmado un acuerdo de colaboración que impulsa la adaptación de vehículos de gasolina para que también puedan consumir autogás. El cambio se amortiza tras recorrer 50.000 kilómetros.
El autogás (GLP) presenta ventajas económicas y ambientales sobre los demás carburantes: permite ahorrar un 40% en el coste del repostaje y reducir las emisiones de gases contaminantes -como el NOx- y de efecto invernadero -como el CO2-, razón por la que los vehículos que lo aprovechan obtienen la etiqueta Eco de la Dirección General de Tráfico (DGT), que autoriza a circular sin restricciones por el centro de las grandes ciudades y otorga descuentos a la hora de aparcar en zonas restringidas.
Además, frente a otras opciones de movilidad sostenible, como el vehículo eléctrico, los automóviles de GLP tienen autonomía para recorrer 1.200 kilómetros y disfrutan de una extensa red de estaciones de servicio donde repostar: unas 650 en toda España, de las que Repsol tiene alrededor de 400.
Como resultado, la matriculación de este tipo de vehículos se ha disparado un 360% en 2018, hasta las 19.664 unidades, y este año sigue la tendencia ascendente: durante los primeros cuatro meses se han registrado 9.188 matriculaciones, con un récord histórico mensual de 2.506 en abril.
Adaptar el vehículo convencional
Además de adquirir un vehículo de GLP, cabe la posibilidad de transformar los de combustión interna convencional, de diésel o gasolina, para que también consuman autogás, ámbito en el que se circunscribe el acuerdo firmado entre Repsol y Confortauto.
La empresa de talleres está capacitando sus instalaciones de toda España para que, de momento, puedan transformar los automóviles de gasolina conformes con la normativa Euro 4, en vigor a partir de 2010. "Aplicamos una estrategia gradual y más adelante también lo haremos con los diésel", ha indicado esta mañana Joaquín Pérez, director de Marketing de la empresa, durante la presentación del acuerdo en Madrid.
Confortauto ya ha preparado unos 150 talleres, localizados en las grandes ciudades, y espera que a final del año ese número haya crecido hasta 650, sobre una red total de 700 talleres. El coste de modificar los vehículos, dependiendo del modelo, ronda los 1.500 euros y sólo se emplea un día de trabajo mecánico.
El cambio más relevante es la incorporación de un depósito para el GLP, que suele ubicarse en el hueco de la rueda de repuesto. Posteriormente hay que validarlo en la Inspección Técnica de Vehículos, que se encargar de tramitar la nueva etiqueta ambiental Eco con la DGT.
Repsol apoya por dos vías
Confortauto disfruta del apoyo de Repsol por dos vías. Por un lado, sus talleres están contando con la asesoría técnica de Begas Motor, que tiene a la petrolera como mayor accionista, con el 28%. Y por otro, Repsol ofrece financiación sin interés para realizar la adaptación del vehículo y ofrece 250 euros en GLP.
Estíbaliz Pombo, responsable de autogás de Repsol, ha recalcado esta mañana que el acuerdo responde a la vocación multienergética de la empresa y que el autogás "es una alternativa real hoy", que ya disfrutan unos 180.000 vehículos en España y 15 millones en toda Europa.