No es ciencia ficción. El empleo de robots humanoides o, cuando menos, de brazos articulados, es ya una realidad en la hostelería, sobre todo en países como EEUU, Japón, Corea del Sur o Singapur. Así, más de 500 restaurantes en todo el mundo usan ya robots que sirven tres cafés en 40 segundos, hacen diferentes tipos de noodles, una tortilla o una ensalada perfectas. En España, la digitalización de los pedidos en muchas cadenas de restauración ya es un robot, como afirma Marius Robles, consejero delegado y cofundador de Reimagine Food, quien se halla inmerso actualmente en un proyecto mediante el cual pretende introducir los robots en toda la cadena de alimentación y agrupar a las startups que están trabajando en robótica para que innoven junto con los restauradores.
El cofundador de Reimagine Food, el primer centro disruptivo del mundo que conecta startups, emprendedores, universidades, centros tecnológicos, empresas de alimentación e inversiones para desarrollar nuevas soluciones innovadoras, cree que pronto -es posible que incluso en los próximos meses- los cocineros y camareros españoles tengan un robot a su lado o que se empiecen a certificar robots para que sirvan como ayudantes en la cocina de un restaurante, algo que ya se hace en 500 establecimientos repartidos por todo el mundo.
Productividad
"No hablamos de un escenario futuro. Los robots ya los tenemos presentes en diferentes ámbitos de nuestras vidas, tocando el piano, limpiando inodoros, alimentando a las vacas que nos dan la leche, jugando al baloncesto identificando el mejor ángulo para encestar, en tareas de limpieza, jugando al golf, dando masajes, etc.", asegura Robles. Según dice, hay aproximadamente 1,6 millones de robots en todo el mundo, presentes sobre todo en las fábricas, y que ahora empiezan a introducirse en los restaurantes. "Estos robots humanoides, a los que siempre hemos visto en una versión más marciana que productiva, están muy alineados con la cuenta de resultados y con la productividad de los restaurantes", señala.
Para demostrar que la presencia de robots en el servicio o en la cocina no es ciencia ficción, Marius Robles, durante la presentación de su ponencia The Robot Restaurant Revolution, en el marco Restaurant Trend, en Ifema, se hizo acompañar de un robot androide que fue capaz de prepararle y servirle un bocadillo de jamón con tomate. Es solo una muestra del papel que la robótica puede llegar a jugar en un futuro en el sector de la restauración.
Robles se refirió también a la distribución de los alimentos cocinados, poniendo como ejemplo dos empresas radicadas en California: Nuru, dedicada a la robótica, que desarrolla vehículos autónomos, así como a Zume Pizza, un restaurante que utiliza robots en muchas fases de producción de la pizza y que cuenta con coches que hornean la pizza mientras la transportan para que llegue hasta el consumidor final en óptimas condiciones.
"Esto nos muestra la exponencialidad que está adquiriendo la robótica", algo que, subraya, está captando la atención de múltiples inversores. La consultora McKinsley prevé que los vehículos autónomos realizarán en 2025 el 86% de las entregas y que el mercado de la robótica aplicada a servicios crecerá entre un 20 y un 25% entre 2018 y 2020 con unas ventas totales para este periodo de 27 millones.
Reducir costes
El cambio se basa en tres ejes: el primero de ellos es la enorme reducción del coste de la tecnología, que ha bajado en solo cinco años más de un 300%, con las grandes marcas como Samsung, Sony o LG destinando fondos para startups. El segundo eje clave es el encarecimiento de la mano de obra y el tercero es que faltan puestos por cubrir. En EEUU, por ejemplo, se calcula que 844.000 personas.
En el último año las inversiones en robótica aplicada al sector de la restauración alcanzaron los 796 millones de euros. "Por lo tanto, no es una moda, no es una tendencia", recalca Robes. Actualmente, el crecimiento se concentra en Asia y en Estados Unidos, aunque de acuerdo con los expertos, Europa se va a sumar pronto a esta tendencia.
En Europa, hay por ejemplo un restaurante en Praga creado exclusivamente con el robot como motor de atracción. Y en India han ido un paso más allá, desarrollando robots con capacidad para trabajar como cocineros y hacer cien variedades de platos que la cultura de allí había ido perdiendo poco a poco. "No estamos hablando de remplazar, estamos hablando de robots que ayudan a recuperar platos que se han perdido", dice el consejero delegado de Reimagine Food.
El futuro pasa ahora por el desarrollo de la tecnología 5G y por evitar que los robots de los restaurantes puedan ser hackeados, garantizando así la seguridad.