
La compañía aeronáutica burgalesa Aciturri negocia la compra de su competidor Alestis. La operación afectaría al 100 del capital social, repartido entre el 62% que tiene Airbus, un 24% de la Sociedad Española de Participaciones Industriales (Sepi) y Unicaja, con un 14%.
Fuentes conocedoras de la operación han asegurado a elEconomista que la venta no está aún cerrada por su complejida,d ya que la burgalesa quiere la aceptación de los tres accionistas, aunque han mostrado su confianza en que pueda estar culminada en un par de meses. Tanto Aciturri como Alestis son proveedores de primer nivel (Tier 1) de Airbus, al que sumunistran piezas para el A400M o el A380.
Uno de los asuntos más complejos en los que se centra la negociación de los flecos pendientes se encuentra en la deuda que arrastra Alestis, ya que los plazos de devolución comprometidos con las administraciones y los proveedores afectarían al importe final, cuyo montante no ha trascendido.
Igualmente, las negociaciones se centran en buscar soluciones al posible solapamiento de procesos que pueden darse tras la compra o la asunción de los centros de trabajo que tiene la compañía sevillana.
Airbus está satisfecha
Desde que Airbus tomó el control de Alestis, ante los problemas que la compañía andaluza estaba generando en la entrega de componentes para sus aviones, siempre ha buscado una integración de sus proveedores de primer nivel.
Airbus nunca tuvo prisa ni urgencia alguna por salir del accionariado de Alestis. El objetivo único fue siempre asegurar la viabilidad y crecimiento, contribuyendo a dotar a la empresa de un plan estratégico e industrial que permitiese garantizar su futuro.
Airbus explica que no busca hacer negocio con la venta de su participación en Alestis y nunca fue su intención maximizar la inversión en Alestis, que cuenta con 1.400 empleados y prácticamente ha vuelto a beneficios.
Aciturri, fundada por Ginés Clemente, siempre ha mostrado su vocación de crecimiento, máxime cuando las dos adquisiciones que ha realizado hasta el momento, Aries Complex y Aerosur han sido satisfactorías.
La compañía, que cuenta con plantas en Madrid, Valladolid, Miranda de Ebro, Alava, Sevilla y Gijón facuró en 2017 alrededor de 303 millones de euros y tiene unos 1.500 trabajadores.
Aciturri se ha mostrado dispuesta a lo largo de los últimos meses a buscar operaciones de compra, para poder incrementar su tamaño, una de las exigencias que siempre ha puesto Airbus, que reclamaba suministradores de tamaño.