
La huelga a la japonesa declarada por Uber y Cabify ha acabado en manos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
La patronal del taxi, Fedetaxi, anunció ayer que presentará hoy una denuncia porque este tipo de práctica está "prohibida en España". Fedetaxi estima que con esta iniciativa "se persigue desacreditar a un competidor en el mercado de la movilidad como es el servicio público del taxi" y anima a los taxistas a sumarse a la iniciativa.
Los taxistas consideran, en concreto, que esta iniciativa es contraria a lo que establece la Ley de Defensa de la Competencia, que "prohíbe acuerdos, decisiones o recomendaciones que tengan por objeto o puedan dar lugar a una restricción de la competencia o acuerdos para fijar precios u otras condiciones comerciales, o la limitación y el reparto del mercado". Asimismo, el gremio dice que la Ley hace mención especial a "anuncios que puedan influir sobre la actuación de las empresas en materia de precios, ventas, condiciones contractuales" y a "boicots" mediante "respuestas coordinadas de empresas que perjudiquen a otro operador".
El ministro de Fomento, José Luis Ábalos, abogó ayer, por su parte, por "buscar una solución equilibrada" al conflicto abierto para que "nadie compita a costa del problema del otro", sino en función de las ventajas que ofrece el mercado. Ábalos aseguró que no se ha separado de la "hoja de ruta" que adelantó durante su reunión con las comunidades autónomas el pasado 1 de agosto, con lo que mantiene su convicción de que sean ellas las que limiten las licencias de las VTC, sin tener que indemnizar por ello. El Gobierno va a dar un plazo de entre tres y cinco años a las comunidades autónomas, en el que van a tener que empezar a expedir licencias autonómicas y crear un marco normativo para su actividad, que luego se pueda desarrollar vía ordenanzas municipales.
Lo que pretende el ministro de Fomento, José Luis Ábalos Ábalos, es que el sector quede sujeto a normativas similares a las de los taxistas, ya que, según dijo, "están hiperregulados, mientras que las VTC disfrutan de una normativa muy laxa, que les da ventajas competitivas".
La asociación AVTC, que agrupa a pequeñas empresas y autónomos del sector de vehículos de alquiler con conductor (VTC), ha convocado por otro lado a los conductores a sendas manifestaciones este jueves y viernes en el Paseo de la Castellana de Madrid, que terminarán ante la sede del Ministerio de Fomento. Las manifestaciones están respaldadas por el Sindicato Libre de Transporte y UGT, que en un principio se había posicionado del lado del taxi, pero que ha acabado aliándose a las VTC. En principio, está previsto que el viernes el Gobierno apruebe el Real Decreto.