
El Corte Inglés ha garantizado a las tres grandes agencias de rating -Standard & Poor's, Moddy's y Fitch- una hoja de ruta con el objetivo de obtener la mejor calificación crediticia (investment grade) de cara a su próxima emisión de bonos por unos 1.000 millones de euros. El plan contempla una amortización de 1.100 millones de deuda para reducir sus compromisos financieros en casi un 30%, mediante una mayor generación de caja y la venta de activos.
El Corte Inglés suma actualmente créditos por importe de 3.650 millones de euros y el objetivo es rebajar esa cifra a medio plazo hasta 2.500 millones, lo que supondría que la deuda se habría reducido a la mitad desde 2013, cuando el pasivo se elevaba a 5.000 millones, y se llevó a cabo la primera refinanciación bancaria.
Para cumplir los compromisos con las agencias de calificación, el nuevo presidente de El Corte Inglés, Jesús Nuño de la Rosa, tiene prevista la venta de activos no estratégicos, fundamentalmente inmobiliarios, pero también de la filial Informática El Corte Inglés (Iecisa). La compañía tecnológica mexicana Kio Networks ha presentado una oferta al consejo de administración para la adquisición de esta filial, por un importe de unos 350 millones de euros y, todo indica, que existe ya un preacuerdo.
Aunque en un principio el grupo se planteó también la opción de abrir un proceso de subasta, esta posibilidad ha quedado finalmente descartada y hay ya una negociación en exclusiva con dicha firma, con la que Iecisa tiene además una sociedad conjunta para la gestión de centro tecnológico en Murcia.
La refinanciación
El plan de desinversiones se lleva a cabo después de que Nuño de la Rosa lograra cerrar ya el pasado mes de enero un acuerdo de refinanciación con Banco Santander, Bank of America Merrill Lynch y Goldman Sachs que, según dijo entonces la compañía, suponía "un hito financiero en la historia de los grandes almacenes, asegura una financiación estable, con menor coste y mayores plazos y elimina garantías".
El nuevo contrato está compuesto por un préstamo puente de 1.200 millones de euros, a un plazo de doce meses y con dos opciones de extensión, hasta un vencimiento máximo de dos años; un préstamo de 1.450 millones de euros, a un plazo de cinco años; y una línea de crédito de hasta 1.000 millones de euros adicionales, a cinco años. Los fondos obtenidos se destinaron a reemplazar el crédito sindicado firmado en noviembre de 2013, cuyo saldo vivo era en enero de 2.153 millones, así como a reordenar el programa de pagarés, cuyo saldo ascendía a 1.315 millones de euros.
Emisión
Para sustituir el crédito puente la compañía ha decidido llevar a cabo una emisión de bonos. Es una operación que inicialmente se iba a llevar antes del verano, pero quedó finalmente aplazada ante la batalla abierta en el capital con Dimas Gimeno, el expresidente del grupo, que fue cesado el pasado mes de junio, pero que no abandonó el consejo hasta el pasado 26 de agosto, una vez alcanzado un acuerdo para su marcha.
El Corte Inglés ha retomado ahora el plan, aunque tras las últimas desinversiones inmobiliarias llevadas a cabo el importe de la misma podría ser algo menor. Hay que tener en cuenta, por ejemplo, que la compañía ha vendido dos locales de pequeño tamaño, uno en Madrid y otro en Bilbao, a Inbest, vehículo de inversión de la gestora Corpfin Capital Real Estate, por un importe que ronda los 100 millones de euros. Los locales están ubicados en la calle Princesa de Madrid y la Gran Vía de Don Diego López de Haro en Bilbao y El Corte Inglés continuará de inquilino. Es una operación de sale and leaseback, que se prevé utilizar también en otros casos en el futuro.
La agencia Standard & Poor's habría otorgado ya una calificación a la deuda del grupo de 'BB', aunque gracias a la valoración de sus inmuebles se habría subido a 'BB+'. La última valoración del patrimonio inmobiliario de El Corte Inglés la llevó a cabo Tinsa, de cara a avalar la refinanciación financiera acometida hace cinco años. En ese momento, la cartera de inmuebles se valoró en 18.000 millones de euros.
El grupo de grandes almacenes cerró, además, el año pasado un buen ejercicio, con Nuño de la Rosa entonces ya como consejero delegado, junto a Victor del Pozo. La cifra de negocios se situó en 15.935 millones de euros, un 2,8 por ciento superior a 2016, y el beneficio neto aumentó hasta los 202 millones de euros, lo que representa un 24,9 por ciento más.