Los accionistas de referencia de Sacyr han reforzado su posición en el capital de la constructora tras la ampliación de capital derivada del scrip dividend. José Moreno Carretero, Demetrio Carceller, Tomás Fuertes y Manuel Manrique han confiado en la evolución de la compañía y han optado por cobrar el dividendo en acciones, lo que ha provocado que hayan aumentado sus participaciones, según describen en las comunicaciones que han remitido a la CNMV.
Sacyr ha emitido este mes 10,64 millones de acciones nuevas para pagar el scrip dividend, de modo que ha aumentado el capital social hasta los 543,75 millones de títulos. Según informó la compañía la semana pasada, el 95,86 por ciento de los accionistas se decantó por cobrar en acciones, mientras que el 4,14 por ciento restante eligió recibir 0,052 euros por título.
Tras la entrega de las nuevas acciones, Beta Asociados, la firma de José Moreno Carretero, ha aumentado su participación del 16 por ciento al 16,17 por ciento. El empresario malagueño rebajó su posición en diciembre después de no ejecutar los últimos derivados contratados con Citibank que vencían en diciembre por el 0,812 por ciento del capital de Sacyr. Controla el 1,934 por ciento de forma directa, mientras que el 14,237 por ciento lo tiene a través de instrumentos financieros derivados. En mayo de 2017 pidió más peso en el consejo, pero aún no ha habido un acuerdo al respecto, ya que una parte del núcleo duro no reconoce la totalidad de su participación.
Disa, presidida por Demetrio Carceller, todavía no ha notificado el cambio, pero también subirá al entorno del 14,8 por ciento -en su alianza con Satocán-. José Manuel Loureda (Prilou y Prilomi) ha subido al 7,82 por ciento y el Grupo Fuertes, por su parte, al 6,27 por ciento. El presidente Manuel Manrique también ha cobrado en acciones y ha elevado su posición al 1,55 por ciento.