La farmacéutica suiza Roche aumentó sus ventas en todo el mundo un 5 por ciento el año pasado, hasta alcanzar los 46.000 millones de euros. En España, donde la multinacional cuenta ya con casi 2.000 empleados, el laboratorio desarrolla buena parte de las investigaciones de sus nuevos fármacos.
¿Qué representa ahora mismo la filial española dentro de Roche?
España continúa siendo un país de referencia para el grupo Roche, lo que se pone de manifiesto con el elevado nivel de inversión en nuestro país. El año pasado invertimos alrededor de 100 millones de euros en I+D+i, que representan cerca del 15 por ciento de la facturación de la división de Farma en España. Nuestra I+D en se mantiene por encima de 45 millones al año, posibilitando que 17.000 pacientes accedan a tratamientos innovadores.
¿Cómo ha sido el año económico para la compañía en España?
2017 ha sido un buen año para nuestra afiliada en España, en términos de facturación, con un crecimiento ligeramente por encima del 3 por ciento, lo que valoramos muy positivamente teniendo en cuenta la situación del entorno en el que nos movemos.
En el conjunto de la compañía, ¿cómo analiza los resultados?
Ha sido un año igualmente positivo. Como ocurre a nivel local, nos movemos en mercados con mucha competencia, especialmente con la entrada de biosimilares que afectarán a tres de nuestros principales productos. Pero gracias a las fuertes inversiones en I+D realizadas a nivel global, donde seguimos estando en niveles ligeramente por encima del 20 por ciento de nuestras ventas, estamos en fase de lanzamiento de cuatro nuevos productos, algunos de ellos ya disponibles en ciertos países, y que están dando resultados muy prometedores.
¿La deuda sigue siendo un problema para Roche en España?
Yo no diría que es un problema, sino que continúa siendo una de nuestras prioridades, ya que debemos garantizar que podemos hacer frente a nuestras necesidades de tesorería. Con todo ello, en 2017 cerramos el ejercicio con una demora media en el cobro ligeramente por debajo de 70 días, lo que supone un récord histórico en los últimos 15 años. Valoramos por ello muy positivamente los esfuerzos de las comunidades autónomas, la eficacia de los mecanismos de pago instrumentados por el Gobierno central, con los planes de pago a proveedores, y el FLA principalmente, y otros proyectos como el de facturación electrónica. Todo ello ha contribuido muy positivamente para dar cumplimiento a la legalidad en materia de morosidad, y ha normalizado la compra pública de medicamentos, otorgando certidumbre al sector farmacéutico y recuperando la confianza y la imagen de España en el exterior.
En España, la compañía está invirtiendo mucho dinero en el centro de excelencia informática. ¿Qué aporta este centro?
Este centro es una prueba de la apuesta del grupo Roche por España, con una inversión anual de alrededor de 50 millones de euros. Se trata de un centro de referencia a nivel mundial para nuestra compañía ya que desde aquí se proporciona soporte de Infraestructura y Data Center, así como servicios de ingeniería global y gestión de proyectos a todo el mundo. Las oficinas de Madrid son la principal infraestructura informática de la compañía en el mundo, dando soporte a 156 países y más de 250 localizaciones, entre las que podemos identificar centros de investigación, producción y logística.
¿Qué innovaciones de Roche pueden llegar al mercado español?
En los próximos meses esperamos presentar novedades terapéuticas importantes, con el lanzamiento de cuatro nuevos medicamentos.