
La neutralidad de Internet es una de las polémicas que más presentes estuvieron en la Red a finales de 2017 en Estados Unidos. Y, sin embargo, pese a que muchas páginas web de uso masivo, como Reddit o Netflix, iniciaron campañas para abogar por su mantenimiento, muchos ciudadanos siguen sin entender el concepto. Burger King ha lanzado un vídeo de cámara oculta para ejemplificarlo de forma sencilla, aunque hayan tenido que frustrar a algunos clientes para ello.
La idea de la neutralidad es simple: los proveedores de la conexión a Internet no pueden limitar la velocidad independientemente de quién sea el usuario o el uso que dé a su conexión. No pueden cobrar más a quien pasa el día viendo vídeos online que a quien sólo navega en foros, que gastan mucho menos ancho de banda.
Sin embargo, la Comisión Federal de Comunicaciones de EEUU aprobó en diciembre el fin de la neutralidad que había impuesto Barack Obama, dando vía libre a un sistema en el que los proveedores podrán ralentizar la conexión en función de cuánto pague el cliente o bloquear determinadas webs, creando un 'Internet a dos velocidades'. Contra ello, 22 fiscales generales de EEUU han demandado al Gobierno federal y la FCC por ser una medida "arbitraria, caprichosa y un abuso".
Burger King ha llevado este fin de la neutralidad a la entrega de su famosa Whopper. En el vídeo difundido por la compañía, al cliente se le da a elegir entre pagar 26 dólares por la hamburguesa si la quiere recibir cuanto antes, o esperar bastante más y pagar sólo 5 dólares. Todo ello pese a tener el alimento ya preparado y embolsado, incluso ante la cara del cliente. Las caras de perplejidad y la frustración de los afectados lo dicen todo:
How would you explain the repeal of Net Neutrality? We did it with the Whopper. Watch the video below: pic.twitter.com/9EWjtbenv8
— Burger King (@BurgerKing) 24 de enero de 2018
"¿No puede darme la hamburguesa? ¿Está lista pero no puede dármela?", pregunta uno de los exasperados clientes al trabajador de la cadena. "Tome la bolsa, yo pondré la hamburguesa en la bolsa dentro de 42 segundos", contesta el empleado mirando su reloj. Esta 'nueva política' llega a frustrar tanto a algunos clientes que le arrancan la bolsa de la mano. Sólo falta ponerles otra cámara oculta en sus casas para comprobar si reaccionarán igual cuando tarden varios minutos en poder cargar un vídeo cuando el fin de la neutralidad en la Red empiece a surtir sus efectos.