
El mundo de las grandes finanzas abrió los ojos respecto al problema del calentamiento global durante la Cumbre de París celebrada hace dos años. Y ayer lo demostró, en el evento One Planet Summit, organizado también en París por el presidente galo para afianzar la agenda climática aprobada entonces y captar financiación con la que abordar el proceso de descarbonización.
Arropados por presidentes de Gobierno y líderes mundiales, abrieron el fuego los grandes inversores: 225 fondos e instituciones financieras, con carteras valoradas en 22,3 billones de euros, se comprometieron a presionar directamente a 100 de las empresas que más contribuyen al calentamiento global -con Repsol, Gas Natural Fenosa y Enel, matriz de Endesa, en el listado- para que reduzcan sus emisiones y avancen en el proceso de transición energética.
Así lo anunció un representante de CalPERS, el mayor fondo de pensiones norteamericano, en nombre de los demás firmantes de la iniciativa, denominada Climate Action 100+. Concretamente, pedirán a las empresas identificadas que establezcan una fuerte gobernanza para gestionar el riesgo del calentamiento, que actúen para reducir las emisiones de efecto invernadero a lo largo de toda su cadena de valor y que sean transparentes para demostrar la robustez de sus planes de negocio en varios escenarios climáticos, de modo que faciliten las decisiones de inversión.
Los grandes inversores publicarán cada año un informe sobre el modo en que las empresas han respondido a sus requerimientos, y aquellas que, a su juicio, hayan progresado lo suficiente, podrán desaparecer del listado.
Tras la iniciativa, alabada por Michael Bloomberg, alcalde de Nueva York, se sucedieron las muestras de compromiso climático:
El Banco Mundial anunció que no financiará más la exploración y extracción de hidrocarburos a partir de 2019, excepto casos puntuales en los países pobres. ING renunció financiar eléctricas que mantengan más de un 5 por ciento de carbón en su mix de generación a partir de 2025. Axa destinará 12.000 millones a inversiones ambientales, cuatro veces más de lo comprometido originalmente. Las utilities EDF y Engie desvelaron inversiones de 25.000 millones en energía solar y de 1.000 millones en eficiencia, respectivamente.
Reacción contra Trump
Los Estados norteamericanos de California y Whashington se unieron a México, Chile, Costa Rica, Colombia y varias regiones canadienses, para desarrollar un mercado de carbono conjunto, en un movimiento contrario a la política negacionista de Donald Trump.