
La SGAE mantiene en su puesto al actual director general de la entidad, Luis Felipe Palacios, después de que el comité de empresa pidiera la semana pasada su destitución después de haberse hecho pública una conversación suya admitiendo que no puede controlar los ingresos y gastos de la sociedad.
En una conversación intervenida por la Policía que figura en el sumario del caso de La Rueda sobre el cobro fraudulento de derechos en televisión, Palacios admitía en julio de 2016 a Rafael Tena, uno de los autores investigados, que "no hay trazabilidad entre recaudación y reparto. No cuadran las cosas. Entra el dinero y sale el dinero sabe dios cómo porque la gente no lo controla". En ese momento el actual director general de la sociedad era director económico y financiero y, por lo tanto, máximo responsable, de la contabilidad del grupo, que según decía entonces, no entendía como funcionaba.
Una batidora
En la grabación, y según figura en el sumario, al que ha tenido acceso elEconomista.es, Luis Felipe Palacios dice que "la propia dinámica reglamentaria que tenemos para el reparto es una batidora en la que salen unas cantidades que pueden ser correctas o pueden no serlo, es una cosa completamente aleatoria. Hay muy poca seguridad".
La SGAE ingresó 239,8 millones de euros por recaudación nacional en 2016, lo que supone un 2,9% menos que un año antes y la situación de Palacios es cada vez más complicada, sobre todo después de la fuerte oposición en la plantilla y la carta que sus representantes han dirigido al presidente de la sociedad, José Miguel Fernández Sastrón, pidiendo su cese inmediato ante la falta de control de las cuentas.
Todas las fuentes consultadas aseguran que por ahora Sastrón no ha decidido dar un paso adelante y destituir al directivo y desde la SGAE insisten, de hecho, en que el puesto del director general no ha sido sometido a votación en ningún momento por parte de la junta directiva.