
La empresa pública Mercasa ha vendido la totalidad de su participación en el consorcio supuestamente implicado en el pago de comisiones a funcionarios angoleños a través del prófugo Guilherme Taveira a cambio de la concesión de adjudicaciones para la construcción de un mercado de abastos en Luanda, la capital de Angola.
Fuentes próximas a la operación han asegurado a Europa Press que esta venta tiene como objetivo alejar a las empresas públicas de operaciones comerciales en el extranjero que están siendo investigadas en los tribunales.
Esta decisión se produce tras la reciente decisión del Consejo de Ministros de cerrar Defex, el pasado 22 de septiembre, tras su pérdida de credibilidad para conseguir contratos y acceso a crédito bancario tras las investigaciones judiciales en las que se ha visto envuelta.