
El plan de Fomento para relanzar la alta velocidad con billetes low cost y ofertas puntuales, como la del 25 Aniversario, está teniendo tanto éxito que Renfe ya tiene problemas para hacer frente al fuerte aumento de la demanda. No en vano, en el primer semestre de 2017 se han incrementado en casi medio millón el número de usuarios del AVE y la ocupación media ya ronda el 75% frente al 73,5% de 2016.
En las rutas más demandadas como Madrid-Sevilla y Madrid-Barcelona, la ocupación supera el 90%. Así, mientras el número de pasajeros sube el 4,5%, Renfe apenas ha sido capaz de elevar un 2,8% la oferta de plazas por kilómetro, un dato que está por debajo de presupuesto.
Los nuevos pasajeros del AVE optan sobre todo por viajar en clase turista aprovechando los bajos precios y el operador ferroviario se está encontrando sin margen de maniobra para aumentar la capacidad al ritmo de la demanda, por lo que ha puesto en marcha diversos planes que le permitan sacar más asientos al mercado en corto plazo. Por ejemplo, a finales de junio el consejo de administración de Renfe aprobó reducir la clase business o preferente en las rutas Madrid-Barcelona y Madrid-Sevilla para incrementar el número de plazas de clase turista.
Así, el operador estatal va a invertir 8,9 millones de euros en cambiar de clase preferente a turistas el coche C3 de la serie de trenes AVE 103, que son los que van a Sevilla y a la Ciudad Condal y actualmente tienen 404 plazas. Así, el tren de alta velocidad se quedará con un sólo vagón de business y otro de club. La medida supone modificar la configuración del coche para que tenga cuatro asientos por fila en vez de tres, lo que, por un lado, permitirá aumentar la capacidad de los AVE y, por el otro, reducir el personal que va a bordo ya que habrá menos pasajeros a los que dar un servicio preferente de comidas.
Fuentes de Renfe explican que esta es una acción puntual para poder asumir la avalancha de demanda de bajo coste y que, de momento, no se repetirá la medida en los trenes de alta velocidad de otras series, como la 102, que también va a Andalucía y a otros destinos muy demandado como Valencia.
Otra de las medidas puestas en marcha por la compañía es incluir trenes de alta velocidad en el concurso que se va a lanzar a principios de 2018 para comprar material rodante con el que renovar y ampliar la flota de la red convencional. Según explicó el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, en una entrevista con El País, el plan de renovación será el "más ambicioso" de Renfe y contará con una inversión superior a los 1.600 millones de euros que han costado los últimos trenes AVE adquiridos este año.
Así, la otra medida que el operador puso en marcha para aumentar la oferta de alta velocidad ha sido la compra de 30 trenes AVE a Talgo, que tendrán la capacidad de llevar hasta a 521 pasajeros. El 80% de la oferta estará destinada a turista y el 20% a preferente, por lo que sólo habrá dos clases. A su vez, los vagones de turista tendrán cinco asientos por fila y los de business, cuatro.