
El Ministerio de Empleo toma el relevo a Fomento en la guerra de la estiba. La patronal Anesco y los estibadores han solicitado formalmente la mediación del Ministerio que dirige Fátima Báñez en la reunión que mantendrán el próximo martes en Madrid. En principio, el encuentro será a las 16.00 horas, en las dependencias del Ministerio, aunque este extremo está todavía por confirmar.
La idea es que un representante de Empleo, que todavía no está designado oficialmente, medie en la negociación colectiva, para propiciar que las partes lleguen a un acuerdo sobre el futuro del sector de la carga y descarga de mercancías portuarias, que está inmerso en un proceso de liberalización.
No en vano, el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, ha aplazado una semana la aprobación del Real Decreto de la estiba para dar margen a una negociación entre las partes, tal y como le han reclamado los partidos de la oposición: Ciudadanos, PNV, Coalición Canaria y PSOE. Sin el apoyo parlamentario del partido de Albert Rivera y PNV, el Ejecutivo no puede sacar adelante la nueva ley de la estiba.
En principio, las materias propuestas por el secretario de Estado de Infraestructuras, Julio Gómez Pomar, para que se negocien entre sindicatos y patronal son la subrogación laboral y continuidad en el empleo, los requisitos de profesionalidad y la gestión de la relación laboral de los trabajadores.
A la espera de que tenga lugar el encuentro, las posiciones de ambas partes están muy enfrentadas. Por un lado, los representantes de los trabajadores, liderados por Coordinadora, quieren que las empresas subroguen a los estibadores en las condiciones actuales y que no puedan despedirles y buscan controlar la formación. Por su parte, las firmas pretenden eliminar el periodo transitorio de tres años para la aplicación total de la reforma, ya que quedarán en desigualdad competitiva frente a las nuevas empresas.