El triunfo de Donald Trump en las últimas elecciones de Estados Unidos dejó en shock a gran parte de la comunidad internacional y añadió un poco más de inestabilidad e incertidumbre a la economía mexicana, que en los últimos meses ha visto desplomarse su divisa a golpe de tuit del magnate norteamericano. Y es que, en los mentideros aztecas ya se comenta medio en broma, medio en serio, que cada mensaje que el futuro presidente de Estados Unidos pone en la red social del pajarito sobre sus medidas proteccionistas le cuesta al peso 50 centavos. No en vano, desde principios de noviembre, el mes de las elecciones presidenciales, el peso se ha depreciado un 14.4% frente al dólar, hasta llegar a máximos de 21.58 pesos por cada billete verde. En cuanto a la moneda única la historia se repite: la divisa mexicana ha perdido un 11.56% hasta los 23.1 pesos por euro. Consulte nuestro Especial 'El turismo, motor de México' (.pdf).
Así, las amenazas del magnate de poner aranceles del 35% a las importaciones de vehículos y las promesas de bajar los impuestos a las inversiones han llevado a varias multinacionales de automóvil a cancelar sus planes de inversión en México y prometer nuevos puestos de trabajo en Estados Unidos, añadiendo más presión a la divisa. La primera en anunciar un cambio en su estrategia fue Ford y, ayer mismo, General Motors (GM) confirmó que trasladará parte de su producción de ejes desde México e invertirá 1,000 millones en Estados Unidos.
"El peso está más depreciado de lo que debería, pero entendemos que es porque desde Estados Unidos se está cuestionando un modelo económico y se está golpeando a la industria automotriz, que genera unos ingresos de divisas de 100,000 millones de dólares al año. Esta situación presiona al tipo de cambio a la baja y eso tiene una doble vertiente, ya que, por un lado, nos beneficia y, por el otro, nos perjudica", explicó Enrique de la Madrid, secretario de Turismo de México, durante un almuerzo organizado por este diario en el que apuntó a su vez que el futuro del país pasa por diversificarse y desarrollar relaciones económicas con otros países que no sean Estados Unidos, ante la llegada de Trump.
Según explicó el titular de la cartera de Turismo, "el tipo de cambio (lleva más de año y medio a la baja) ayuda a que suba tanto el turismo extranjero como nacional, ya que a los mexicanos les sale más caro salir y optan por viajar más por el interior del país" -el 89% del turismo de México es nacional-. En esta línea, un peso más barato anima a los estadounidenses y a los latinoamericanos a elegir el país como destino de vacaciones al ser mucho más barato para ellos. A pesar del claro papel de la divisa en la evolución del turismo, De la Madrid también quiso apuntar al acuerdo entre Delta y Aeroméxico, que ha aumentado las conexiones entre ambos países, y a las iniciativas de promoción llevadas a cabo por su país como la participación en la película de James Bond Spectre y el nuevo espectáculo del Circo del Sol, así como la organización de un nuevo premio de la Fórmula 1.
Las declaraciones del secretario, que prevé que "la tendencia del sector del turismo siga siendo muy positiva", tienen su fiel reflejo en las últimas cifras publicadas por el Ejecutivo azteca y las empresas privadas. La llegada de turistas ha crecido un 8 por ciento en el año y los ingresos subieron un 10 por ciento. "En apenas cuatro años hemos ganado 11,6 millones de turistas internacionales y debemos estar subiendo un puesto en el ranking de destinos turísticos más visitados elaborado por la Organización Mundial de Turismo", dijo De la Madrid.
En esta línea, los principales gestores aeroportuarios aztecas han registrado alzas de doble dígito en el tráfico de turistas nacionales y fuertes subidas en los pasajeros internacionales, sobre todo en destinos de sol y playa como Los Cabos (+ 13%), Puerto Vallarta (+ 11%) o Cancún (+7.3%).
"En México el turismo va muy bien. Ahora supone el 8.7% del PIB y un ingreso de 19,500 millones de dólares, lo que sitúa al sector cerca de superar a las remeses en generador de divisas. En un periodo de 10 años el turismo creció por debajo de la economía y en los últimos años ha pegado un gran repunte que va a mantener en 2017. Ha crecido por encima del Producto Interior Bruto (PIB)", sentenció el secretario.
Diversificar mercados
Desde 2014, unos años en los que el peso se ha depreciado un 63% ante el dólar, el número de estadounidenses que visita el país azteca ha subido. Hace cuatro años, de cada 100 norteamericanos que cogían un avión sólo 14 elegían México como destino y ahora es el 18%. A pesar de este alza, los estadounidenses han pasado de suponer el 70% de los turistas extranjeros que visitan el país azteca a ser el 58%, debido al aumento en la llegada de los viajeros de otros países de América Latina y al aumento de las visitas entre los europeos, sobre todo ingleses y alemanes. En este punto, el objetivo del Gobierno mexicano es reducir la dependencia de los turistas norteamericanos al 50% del total, ya que son muy conscientes de la importancia de diversificar y más aún en un momento en el que la inminente llegada de Donald Trump a la Casa Blanca (toma posesión el viernes) pone en riesgo las relaciones entre ambos países.
"En turismo y en otros sectores tenemos que reconocer que hay que cambiar. Lo fácil y lógico era vincularnos, depender más de Estados Unidos e integrar las cadenas de producción, pero ahora sabemos que tendremos que diversificarnos, no sabemos hasta donde tendremos que cambiar", explicó De la Madrid, que apuntó que "para México hay más mundo para vender que Estados Unidos".
Y es que, el Gobierno mexicano no duda de que Trump vaya a hacer todo lo posible para cumplir con las promesas lanzadas durante la campaña electoral, que implican mucho más proteccionismo e, incluso, construir un muro en la frontera entre Estados Unidos y México. Unas medidas que si son muy positivas para los empresarios terminarán por animarles a trasladar las inversiones al país norteamericano y obligará a los demás países de América Latina a tomar medidas para competir y ser atractivos para los inversores norteamericanos. "Coforme Trump avanza y realiza nombramientos, cada vez hay menos elementos para dudar de que va a hacer lo que está diciendo. Sí que va a haber intentos, pero no sabemos en qué van a quedar", sentenció.
"Trump habla de bajar la tasa a las inversiones y eso va a llevar al resto de los países a hacer lo mismo. Las tasas que quiere poner a las importaciones y los menores impuestos a la inversión pueden llevar a los empresarios a modificar sus estructuras productivas y dejar de importar o fabricar fuera", explicó, antes de asegurar que las decisiones del magnate no sólo van a afectar a México, ya que no cree que el nuevo Gobierno de Estados Unidos vaya a realizar -leyes ad hoc- para el país azteca. "Pero, perdón que lo diga, pero no solo nos va a afectar a México. Todos los países tendrán que ajustarse y tomar medidas para compensar el proteccionismo propuesto y buscar nuevos motores de crecimiento, tal y como lleva haciendo México durante los últimos años", aseguró el secretario de Turismo de México que visita España y Europa durante la semana de Fitur, con el objetivo de promocionar el destino entre los europeos.
Mas allá del sol y playa
Dentro del plan de Ejecutivo azteca de "buscar nuevos motores de crecimiento" se encuentra seguir impulsando el turismo, ya que es bueno "para erradicar la marginalidad en las distintas regiones" y atrae inversiones extranjeras (construcción de hoteles, más aperturas de rutas de aerolíneas) y genera puestos de trabajo (el empleo turístico ha crecido a doble velocidad que la media de la nación). Para ello, De la Madrid insiste en la importancia de diversificar la oferta e ir más allá del turismo cultural. Así, el Gobierno está trabajando para impulsar el turismo gastronómico, el cultural (Pueblos Mágicos), el de retiro y el médico. "Hay un sector de americanos que no está asegurado y viene a operarse a México porque es más barato y también queremos desarrollar un turismo de retiro para esas personas a las que la pensión les da mucho más de sí en México", dijo De la Madrid.
El secretario de Turismo visita España en un momento en que México ha saltado a la actualidad por el alza de la gasolina y las revueltas y robos que se están dando en el país. El político explicó por un lado que con los actuales precios del petróleo y la producción de crudo no pueden seguir subvencionando la gasolina y por ello ha subido los precios y aseguró que trabajan en reforzar la seguridad y la policía.