Empresas y finanzas

Los analistas ven posible un pacto de Vivendi y Berlusconi para repartirse Mediaset

La navidad ha templado los ánimos en la guerra abierta que mantuvieron el grupo de comunicación francés Vivendi y Mediaset Italia en plenas vísperas de las fiestas. Los analistas de Natixis apuntan a la consecución de un acuerdo amistoso entre las dos compañías, por el que se repartirían el negocio televisivo.

Concretamente, los expertos señalan que el grupo galo tomará el control de la empresa italiana de forma afable, para, a continuación transferir a Fininvest (empresa controlada por la familia Berlusconi y mayor accionista de Mediaset con el 33,5% del capital) el control del 51% del negocio de la televisión en abierto. De este modo, la sociedad del ex primer ministro italiano podrá continuar con la dirección del negocio "a corto y medio plazo", según avanza Natixis en una nota, mientras que Vivendi gestionaría la televisión de pago, junto con la producción y los derechos de la programación de la misma.

Los analistas estiman que la inversión inicial de Vivendi sobre Mediaset ascenderá a los 2.800 millones de euros. Actualmente, el grupo de televisión italiano tiene un valor en bolsa de 4.840 millones de euros.

El avance del grupo galo

Vivendi, dueña de Canal+ Francia, comenzó su avance sobre Mediaset Italia el pasado 13 de diciembre cuando anunció que había adquirido el 12,32 por ciento del capital de la italiana. Tan sólo un día después, la compañía gala alcanzó el 20 por ciento del grupo televisivo, hasta llegar el pasado 22 de diciembre a controlar el 28,8 por ciento del capital. Mediaset tachó la escalada de la firma francesa de "ataque oscuro" y aseguró que defendería los intereses de los accionistas de la sociedad ante una posible opa hostil. Fininvest, por su parte, interpuso una demanda ante la Fiscalía por manipulación del mercado y puso los hechos en conocimiento del regulador bursátil del país, Consob.

Ambas compañías mantuvieron finalmente una reunión el 19 de diciembre, tras la que Vivendi anunció que no adquirirá más del 30% de la italiana. Los desencuentros se iniciaron tras la ruptura del acuerdo tomado en abril, por el que los dos grupos se unirían para crear un Netflix de Europa del Sur.

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