La tradicional reunión anual de directivos de Banco Sabadell, celebrada ayer, dio a conocer las líneas maestras del banco en los próximos años. La entidad, que en un principio había anunciado que presentaría un nuevo plan estratégico trianual en el primer trimestre de 2017, finalmente lo comunicará en los primeros meses de 2018 para centrarse el próximo ejercicio en TSB.
Según explicó Josep Oliu, presidente del banco, las prioridades para la filial británica serán ?la migración que tendrá lugar a finales de 2017 con la implantación de herramientas digitales y de la plataforma. Además, TSB debe aprovechar las capacidades del grupo con una autonomía centrada en el negocio, que ayude a la escalabilidad con crecimientos en hipotecas y cuentas, y que nos sitúe en una mejora de eficiencia a través de sinergías de migración y mejora de costes?, explicó el ejecutivo.
Además de impulsar a la filial británica, Sabadell ha insistido en que sus otros dos polos de atención para los próximos años son España y América y más específicamente, México. Sobre el negocio español, Oliu adelantó que espera impulsar la rentabilidad del banco hacia los dos dígitos y que la morosidad se coloque, al cierre de 2017, por debajo del 5 por ciento.
Un trienio cerrado
Banco Sabadell, que está viviendo un año complicado por su exposición al Reino Unido y la inestabilidad creada por el sí al Brexit, repasó en su reunión con directivos los avances logrados gracias al plan estratégico cerrado este año. En el periodo 2013-2016, adelantó que había multiplicado por tres su beneficio neto y por casi dos el margen de intereses, que ha pasado de 2.575 millones a los 4.900 con los que espera terminar 2016.
Asimismo, destacó la fuerte internacionalización lograda en estos años, en los que el porcentaje de negocio en el exterior aumentado del 5 al 32 por ciento.