La empresa Cascajares, conocida especialmente por sus capones rellenos, confía en terminar el año con una facturación en torno a los 12 millones de euros, lo que supondría un aumento de casi un 20% respecto a 2015.
Fuentes de la compañía resaltan que la Navidad es un período clave para su negocio, ya que una tercera parte de todos sus ingresos se produce en estas fechas.
Por el momento, las estimaciones de cara a las próximas fiestas son optimistas, lo que ha llevado a la firma palentina a elevar un 10% su producción de asados.
Cerca de 60.000 "maletines" vendidos
De hecho, los "maletines" de Cascajares -con platos precocinados típicos de estas fechas, como el capón, la pularda, el cordero o el cochinillo- se pueden encontrar en toda España, y sólo durante las Navidades confían en vender cerca de 60.000 de estas unidades.
Cascajares cuenta con cerca de un centenar de empleados repartidos en sus dos fábricas -una en Dueñas (Palencia) y otra en Quebec (Canadá)- y su apuesta por salir de España ya permite que el 50% de sus ingresos proceda de la exportación.
