
Nissan, la segunda mayor fabricante de vehículos de Japón ha entablado negociaciones para hacerse con una participación del 30% en la división de automóviles en otra de las grandes empresas del sector en el país: Mitsubishi Motors. Sobrepasaría así a la matriz, Mitsubishi Heavy Industries, que cuenta con el 20%.
La operación, de la que ha informado la cadena pública nipona NHK, estaría valorada en más de 200.000 millones de yenes, unos 1.611 millones de euros, y se produciría sólo unas semanas después del escándalo sobre emisiones.
La firma supuestamente habría manipulado las cifras de eficiencia energética para hacer creer que sus automóviles consumían menos combustible y emitían menos gases.
Ambas empresas, compradora y comprada, colaboran desde hace años en un segmento muy importante en Japón, el de los minicoches, con una empresa conjunta al 50% que diseña minicoches -luego fabricados por Mitsubishi Motors y suministrados a Nissan-.
También cuentan con una fructífera colaboración en el campo de los vehículos eléctricos, con el objetivo de hacer frente a Toyota y Honda.