
El Gobierno regional de Atyrau (al oeste de Kazajistán) ha adjudicado al grupo español Eurofinsa un contrato para construir una planta de agua residual en la provincia que tratará 50.000 metros cúbicos diarios. Por el momento se desconoce la cuantía del contrato ya que el volumen definitivo se está cerrando a falta de concretar varios detalles de ingeniería, según confirma a elEconomista Ignacio Casanovas, responsable del CEI área de Eurofinsa.
El acuerdo se enmarca dentro de la visita del ministro de Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo, a Kazajistán, acompañado por una delegación de empresarios españoles para abrir camino a futuras inversiones en el país.
"La planta tratará agua residual de la ciudad para uso técnico, es decir, para suministrar agua a los complejos industriales de la región de Atyrau", explica Casanovas. La firma del contrato marca el inicio de la construcción del proyecto, que debe estar entregando agua a finales de 2018. El acuerdo engloba el diseño, el suministro, la instalación y el montaje de la planta.
Compromisos al desarrollo
Ignacio Casanovas firmó también ayer un Memorándum de Entendimiento con el vicegobernador de la región de Atyrau, Gumar Dyussembayev, en el que se comprometen al desarrollo industrial y tecnológico para dar una solución para la gestión del agua en la provincia. En este caso, se trata de un consorcio a tres entre Eurofinsa, la empresa kazaja Caspiy Solutions y el ejecutivo de Atyrau, que trabajará en desarrollar "proyectos acuíferos" que englobarán "el ciclo integral del agua", según explica el responsable del CEI área de Eurofinsa a elEconomista.
El propósito del memorándum firmado es iniciar los pasos necesarios entre las partes para el desarrollo del proyecto. Los socios deberán definir a partir de ahora su respectiva participación, así como sus obligaciones y responsabilidades en el mismo. El memorándum tiene una duración inicial de tres años, que podría prorrogarse.
El grupo español, que actualmente tiene presencia en 26 países, se registró en Kazajistán hace tres años bajo el nombre de Eurofinsa KZ, aunque es ahora cuando comienza a dar los primeros pasos en el país.
El titular de Exteriores acudió ayer a un foro empresarial celebrado en Astaná, capital de Kazajistán, con el objetivo de potenciar las inversiones españolas en el país. El ministro de Investigación y Desarrollo kazajo, Asset Issekeshev, quiso dejar claro durante el encuentro que Kazajistán es un país tranquilo y seguro para las inversiones españolas.
Recordó que el Gobierno nacional ha puesto en marcha el plan 2016-2020 para privatizar varias de las empresas públicas, con el objetivo de conseguir liquidez en un momento en el que la economía kazaja pasa por una situación complicada tras la caída del precio del petróleo. De este modo, Issekeshev ha invitado a las firmas españolas a participar en sectores necesarios en el país como la energía o las telecomunicaciones.
Por su parte, García-Margallo destacó que España tiene un gran potencial en sectores estratégicos como la construcción, el turismo y las infraestructuras, que actualmente reclama el país kazajo. El ministro de Exteriores aseguró que el objetivo del encuentro es mostrar la excelencia de las empresas españolas. "Podemos cubrir las necesidades de un país que está empeñado en dar un paso adelante, como es Kazajistán", insistió García-Margallo.