
El partido político Unión, Progreso y Democracia (UPyD) remitió ayer un escrito de acusación a la Audiencia Nacional en el que pidió diez años de cárcel, la pena máxima posible, para Miguel Blesa, Rodrigo Rato e Ildefonso Sánchez Barcoj por el uso y disfrute de las conocidas como tarjetas black.
La formación magenta solicita concretamente para los tres imputados seis años de prisión por un delito de apropiación indebida cometido a través de sus propias visas y cuatro años más por otro delito de administración desleal por la emisión del resto de tarjetas para los otros 63 consejeros. Además requiere la inhabilitación para empleo o cargo público y para la profesión bancaria de los tres directivos.
UPyD tampoco se olvida en su escrito del resto de consejeros de la entidad que utilizaron las black para los que reclama seis años de prisión también por apropiación indebida y la inhabilitación para el empleo o cargo público y para la profesión bancaria.
Andrés Herzog, portavoz del partido, aseguró que presentó el escrito de acusación "por responsabilidad" antes de que los responsables puedan quedar impunes. La formación no consiguió representación parlamentaria en las últimas elecciones general y aseguró que desistiría de las causas judiciales en las que se mantiene personada, como la de las Preferentes, la de la familia Pujol o el recurso contra la consulta catalana del 9 de noviembre de 2014.
Sin embargo, UPyD ha querido remitir el documento a la Audiencia antes de su desistimiento "para evitar que alguno de estos presuntos corruptos pueda salir indemne de sus delitos".
Herzog añadió: "Esto es lo que podría suceder directamente si la Fiscalía o el resto de acusaciones no piden la apertura de juicio para algunos responsables de las tarjetas black". El escrito representa a todas las partes de acusación y no sólo al partido político, con el objetivo de que el próximo desistimiento del proceso judicial por parte de la formación no haga decaer la acusación.
Rato devolvió el dinero
El exdirector del FMI recordó al magistrado de la Audiencia Nacional, Fernando Andreu, en su recurso contra el fin de la instrucción del caso que devolvió los 99.054 euros gastados con su "tarjeta black". Rato pidió además al magistrado que incluyera este hecho en su escrito.
El exbanquero, entre otras cosas, gastó 2.000 euros con su visa en bares y discotecas en tan sólo trece días en febrero de 2011, además de pagar habitaciones de hoteles, restaurantes y usar la tarjeta para hacer la compra. También hizo varias retiradas de dinero en efectivo.