El consejero delegado de Iberia, Rafael Sánchez-Lozano, ha decidido "de común acuerdo" con la compañía aérea renunciar a su cargo, según ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Además, también saldrá del consejo de administración de IAG con efecto inmediato. Luis Gallego, actual CEO de Iberia Express, ocupará su puesto al frente de Iberia.
En la nota enviada al regulador bursátil, Sánchez-Lozano, que ocupaba el cargo desde julio de 2009, señala que "tras alcanzar el acuerdo con el mediador y la mayoría de los sindicatos, logramos un hito importante en el proceso de restructuración de la compañía. Iberia está iniciando ahora una nueva etapa y es tiempo de traspasar el mando a mi sucesor".
ERE y creación de empleo
Por su parte, Willie Walsh, el consejero delegado de IAG, destaca la importante labor del directivo al frente de la aerolínea española durante "un periodo muy difícil", en referencia a la situación económica del país y a la reestructuración de la compañía, posterior a la integración con British Airways.
Y es que la renuncia del consejero delegado de Iberia llega solo dos semanas después de firmar el acuerdo para el ERE con los sindicatos y poner fin a la huelga que duró varios días. En función del plan pactado, que fue propuesto por el mediador para resolver el conflicto laboral, se despedirá a 3.141 empleados de Iberia, de los que el 80% tendrán que abandonar la compañía en 2013.
La compañía abonará una indemnización de 35 días por año, frente al mínimo de 20 días que permite la reforma laboral de Fátima Báñez. En principio, esto supondrá un coste de unos 500 millones de euros a IAG, aunque podría encarecerse tras la nueva normativa sobre jubilación anticipada y despidos colectivos aprobada por el Gobierno.
En cuanto a Luis Gallego, que pasa de capitanear la nueva low cost de IAG a ponerse al mando de la aerolínea de bandera española, Walsh ha puesto en valor que haya conseguido convertir a Iberia Express en una compañía "rentable, puntual" y con "popularidad entre sus clientes". Además, destaca que haya creado 500 puestos de trabajo "muy necesarios en España".
Para Gallego es "un honor" ocupar la dirección de Iberia y confía en conducir a la aerolínea "hacia una nueva etapa y un futuro exitoso".