Empresas y finanzas

Archivan la causa abierta contra la familia Botín por las cuentas de Suiza

  • El juez considera que ya han regularizado su situación ante la Agencia Tributaria
  • Ya pagaron unos 200 millones de euros en su momento con este fin
El presidente del Santander, Emilio Botin.

El titular del Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional, Fernando Andreu, ha decidido archivar la investigación abierta contra el presidente del Banco Santander, Emilio Botín, y varios miembros de su familia, incluidos sus cinco hijos, por la presunta comisión de delitos contra la Hacienda Pública y falsedad documental por una cuentas que tenían en Suiza, en el HSBC.

El magistrado ha decidido archivar la investigación al concluir que Botín y su familia han regularizado de forma "correcta y veraz" su situación fiscal. "La regularización practicada por los denunciados se puede considerar que es correcta y anterior a que la Agencia Tributaria incoara un procedimiento de inspección y verificación", señala el juez en el auto dictado este martes, contra el que cabe recurso de apelación.

De esta forma, el juez exime de cualquier responsabilidad penal al presidente de la entidad cántabra y a cinco de sus hijos, así como a su hermano Jaime Botín y a sus respectivos cinco hijos, aplicando el artículo 305.4 del Código Penal, que permite las regularizaciones fiscales antes de la apertura de un expediente por parte del fisco.

Los hechos denunciados se remontan a mayo de 2010, cuando las autoridades fiscales francesas informaron a la Agencia Tributaria española sobre una serie de personas con fondos en cuentas del banco suizo HSBC Private Bank Suisse. Esta actuación llevó a la Agencia Tributaria a investigar a 659 contribuyentes (2 personas jurídicas y 657 físicas) que tenían más de 3.000 cuentas en Suiza, en las que podría haber entre 6.000 y 8.000 millones de euros.

Entre estas personas estaban doce miembros de la familia Botín, Emilio Botin y sus cinco hijos -entre ellos Ana Patricia-, su hermano Jaime y sus otros cinco descendientes. Se les acusaba de no haber presentado las autoliquidaciones del IRPF y del Impuesto sobre el Patrimonio entre 2005 y 2009.

A petición de la Agencia Tributaria, los doce miembros de la familia Botín procedieron a regularizar su situación fiscal presentando declaraciones complementarias con las rentas de las que eran titulares "trust, fundaciones y otras figuras fiduciarias" vinculadas a ellos.

Pago de 200 millones

En concreto, a raíz de que la Agencia Tributaria requiriera información, los doce miembros de la familia Botín presentaron 72 declaraciones del IRPF y del Impuesto sobre Patrimonio entre 2005 y 2009 por los activos de la herencia familiar en Suiza, lo que les llevó a pagar a Hacienda unos 200 millones de euros.

Sin embargo, la Agencia Tributaria sospechaba que estas declaraciones complementarias no eran totalmente "veraces, completas y espontáneas", por lo que decidió remitir toda la información a la Fiscalía Anticorrupción para que dirimiera si procedía o no una "excusa absolutoria" del delito fiscal.

La información de las regularizaciones que tuvo lugar se hizo pública después de que el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu admitiera a trámite en junio de 2011 una denuncia presentada por la Fiscalía Anticorrupción contra el presidente del Banco Santander, Emilio Botín, su hermano Jaime y sus respectivos hijos, por presuntos delitos contra la Hacienda Pública y falsedad documental.

No obstante, se comprometió a archivar las actuaciones si comprobaba que las regularizaciones practicadas era "completas y veraces", como finalmente ha ocurrido.

En aquel momento, Anticorrupción se vio obligada a iniciar acciones judiciales para evitar que prescribieran las actuaciones relativas al ejercicio 2005, lo que se iba a producir el 30 de junio de 2011.

La Fiscalía Anticorrupción tuvo conocimiento de las cuentas vinculadas a la familia Botin cuando se filtraron los datos de cuentas secretas del banco suizo HSBC en 2010.

El origen de las cuentas

Según fuentes próximas a la familia Botín, el origen de ese patrimonio en Suiza se debe a la huida del padre del presidente del Banco Santander a ese país en 1936, cuando acababa de estallar la Guerra Civil española y fue cesado de sus cargos en la entidad financiera.

Durante su estancia en Suiza, Emilio Botín Sanz de Sautuola y López abrió una cuenta a la que trasladó parte del patrimonio familiar y creó una fundación para que lo administrara.

Reacciones

Los portavoces de la Familia Botín (Jesús Remón y Rafael Mateu de Ros), en una declaración remitida a EFE, señalan que el sobreseimiento "confirma lo que ya dijimos cuando se admitió a trámite la querella, en junio de 2011: que la familia había realizado una regularización voluntaria y completa y que estaba y está al corriente de todas sus obligaciones fiscales".

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky