
Banco Santander, Bankinter, Sabadell y CatalunyaCaixa ya han hecho pública su decisión de adherirse al código de buenas prácticas bancarias aprobado la semana pasada por el Consejo de Ministros. Éste tiene por objetivo minimizar el impacto social y económico de los desahucios y permitirá la dación en pago (entrega de la vivienda para saldar la hipoteca) como última opción.
Los bancos pueden adherirse de forma voluntaria a este código de buenas prácticas, pero una vez suscrito, será de obligado cumplimiento, incluso se podrá recurrir a los tribunales para ello. La permanencia en el código será, como mínimo, de dos años.
Además, dentro de los incentivos fiscales previstos por el Gobierno para animar a la banca a incorporarse al código, figuran bonificaciones fiscales en la novación de la hipoteca para los casos de reestructuración de la deuda, y en las escrituras.
En el caso de la entidad que preside Emilio Botín, el banco mantiene, adicionalmente, la iniciativa que lanzó a finales de julio del año pasado. En virtud de la misma, otorga una moratoria del pago de capital durante tres años, sin modificar las condiciones financieras y permitiendo el alargamiento del plazo, a aquellas familias que hayan visto reducidos sus ingresos o en las que uno de los miembros esté en paro.
Según ha informado el banco, estos límites se están aplicando con "flexibilidad" y la entidad facilita estas ventajas a todos los clientes con hipoteca que cumplan estos requisitos. En concreto, señala que la moratoria hipotecaria ha beneficiado ya a 9.820 familias por un importe total de 1.634 millones de euros.
Por su parte, el Consejo de Administración de CatalunyaCaixa ha aprobado su adhesión al mencionado código, y ofrecerá a sus clientes hipotecarios en riesgo de exclusión un alquiler social de dos años. Al sumarse a esta iniciativa, la entidad busca emprender una "política de flexibilización hipotecaria" que favorezca "alternativas" a las familias afectadas por la crisis y con dificultades para el pago de sus cuotas hipotecarias.
Durante 2011 la caja ha flexibilizado las cuotas de sus préstamos a más de 12.000 familias y desde 2008 ha efectuado la transformación de la hipoteca en un contrato de alquiler a más de 1.850 clientes, mientras que otras 6.500 familias han optado por la dación en pago.
También Bankinter ha decidido adherirse este miércoles al nuevo código de buenas prácticas impulsado por el Ejecutivo. Con esta decisión, manifiesta su "convencimiento de que toda contribución que ayude a combatir la difícil situación por la que pasan muchas familias en las circunstancias actuales es útil, es válida y sus beneficios compensan con creces sus costes".
Según la consejera delegada de Bankinter, María Dolores Dancausa, "estamos convencidos de que sólo con el compromiso y la determinación de todos será posible superar esta dura situación económica que entra ya en su quinto año".
De acuerdo con el nuevo código implantado, al que ayer se sumó Ruralcaja, se aplicarán las tres fases previstas: reestructuración de la deuda, estudio potestativo de realización de una quita, y, finalmente, realización de la dación en pago como medio liberatorio de la deuda.
Mientras, desde el Banco Sabadell señalan que la entidad ya estaba aplicando medidas para atenuar el impacto de los desahucios, aunque se ha comprometido a aplicar también las iniciativas que propone el Gobierno.
Por su parte, Novagalicia Banco ya ha anunciado que someterá a la aprobación de su próximo consejo de administración la adhesión voluntaria al código de buenas prácticas.
Un total de 23 cooperativas también se adhieren
El Grupo Cajamar, que agrupa a seis cooperativas de crédito y al que está previsto unirse Caja Rural de Canarias, el grupo cooperativo Caja Rural del Mediterráneo, formado por otras 15, y Caixa Rural Les Coves de Vinromá también se adherirán al código de buenas prácticas sobre desahucios y que contempla la dación en pago para familias con todos sus miembros en paro como última opción.
Así lo ha anunciado en un comunicado la Unión Nacional de Cooperativas de Crédito (Unacc), que concreta que estas entidades representan el 35% del sector de cooperativas de crédito. "Esta medida es un paso más que da el modelo de banca cooperativa en España para evitar la exclusión social", afirma la patronal.
Unacc además recuerda que las cooperativas ya están aplicando de forma voluntaria algunas de las iniciativas recogidas en el decreto que aprobó el Gobierno el pasado 9 de marzo.
En este sentido, subraya que Cajamar ya ha promovido la reestructuración de la deuda, la quita en el capital pendiente de amortización y la dación en pago, medidas que son "habituales" en esta entidad.