
Los principales problemas con los que se encontrarán las grandes multinacionales de todo el mundo durante los próximos meses serán la creciente regulación de los diferentes mercados, los vaivenes de la crisis financiera y el progresivo envejecimiento de la población, según el estudio Strategic Business Risk 2008. The Top 10 Risk for Business, elaborado por Ernst & Young y Oxford Analytica.
A los tres principales problemas se unen el desarrollo de los mercados emergentes, la consolidación y una correcta transición del modelo de negocio, la crisis energética, las transacciones estratégicas, la inflación, la preocupación por el medioambiente y la nueva demanda de los consumidores.
En cuanto a la regulación en los diferentes mercados y países, las dificultades serán mayores en los países emergentes, donde el cumplimiento de las distintas normativas internacionales y la adaptación a las normativas locales suponen una dificultad para las empresas internacionales.
La crisis financiera, la amenaza de las hipotecas basura, el llamado credit crunch o la inestabilidad de los precios del crudo y de los alimentos ponen de manifiesto la vulnerabilidad de los mercados financieros, que afectará, sobre todo, al sector bancario, al mercado de capitales, al inmobiliario, al de asset management o al de la energía.
El desarrollo de las empresas en los mercados emergentes supone otro importante riesgo estratégico motivado por el desconocimiento de los mismos. El 60% de las compañías que llegan a estos países permanecen en ellos menos de diez años, y el 20% de éstas, están incluso menos de dos, según el informe.
Consolidación y estrategia
La consolidación y una correcta transición del modelo de negocio ha estado protagonizado por las grandes operaciones corporativas, fusiones y adquisiciones, grandes reestructuraciones, etc. El informe vislumbra a corto plazo operaciones de esta naturaleza en los sectores de la banca o los medios de comunicación.
El impacto de los costes energéticos afectará a todos los sectores, y en especial al del transporte, los productos de consumo o en el inmobiliario, indica el Informe.
El tipo de transacciones estratégicas afectará especialmente a las empresas de los sectores de automoción, asset management, medios de comunicación o telecomunicaciones, que tendrán que aprovechar las sinergias y realizar movimientos rápidos en el mercado.
En cuanto a la inflación, los analistas del estudio pronostican una crecimiento especialmente en aquellos negocios donde el control de costes supone la mayor baza competitiva como son la industria de productos de consumo o de 'asset management'. La creciente preocupación por los temas medioambientales y el cambio climático generarán nuevas requisitos económicos y regulatorios para las empresas.
Por último, anticiparse y responder a la nueva demanda de los consumidores constituye el último de los retos identificados por las compañías en los meses que vienen. El protagonismo de los consumidores ha crecido en los últimos años, en buena parte gracias al auge de las nuevas tecnologías e Internet.