
Al final, el Ministerio de Economía podría aceptar la petición de las cajas y permitir, con condiciones, que puedan sacar sus bancos a bolsa después de septiembre, siempre que antes de esa fecha hayan iniciado los trámites para dar el salto al parqué.
Así se ha expuesto en las últimas reuniones para rematar los detalles del plan de fortalecimiento del sistema financiero, que eleva los requisitos mínimos de capital de las entidades españolas y recibirá hoy el visto bueno del Consejo de Ministros.
El departamento que dirige Elena Salgado es más partidario de permitirlo en algunos casos, con la condición de que una entidad se comprometa a reforzar su capital antes de septiembre.
La fórmula para hacerlo sería llegar a un acuerdo con un inversor privado o con la venta de participaciones industriales, por ejemplo.
Más flexibilidad para determinar qué es capital
Por otro lado, Economía también podría haber flexibilizado los términos para determinar qué computa como capital. En este sentido, las provisiones genéricas y los llamados "coco" -bonos convertibles en acciones bajo determinadas circunstancias- podrán ser utilizados por las entidades españolas para alcanzar los nuevos requerimientos de capital que exige el Gobierno.
La decisión de incluir tanto las provisiones genéricas -las que se hacen en función del crecimiento del volumen de créditos- como los "contingent convertibles" ("cocos" por sus siglas en inglés) en el capital principal se habría tomado en los últimos encuentros que se han celebrado entre el sector financiero y el Ministerio de Economía.
Según este real decreto, las entidades cotizadas deberán tener un capital principal de al menos el 8%. Ese requisito se eleva al 10% en el caso de aquellas entidades que tengan una dependencia de la financiación de los mercados mayoristas superior al 20% y que no coticen o no tengan un socio que controle un porcentaje significativo de su capital.