Madrid, 16 sep (EFECOM).- El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, se reúne mañana con varios empresarios españoles con intereses en su país, en un momento en el que, aunque las relaciones comerciales aumentan a buen ritmo, España perdió importancia el pasado año como proveedor y cliente del país amazónico.
Según datos del Informe Económico y Comercial sobre Brasil del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, en 2006 España hizo ventas a Brasil por valor de 1.108,94 millones de euros, el 7,39 por ciento más que el año pasado.
Pese a este incremento, España perdió cuota de mercado y se convirtió en el decimoquinto proveedor del país amazónico, tres puestos por debajo de la duodécima posición lograda en 2005, debido al empuje de las economías emergentes, especialmente de China.
Por su parte, las importaciones a Brasil también crecieron, a un ritmo del 6,94 por ciento en tasa interanual, hasta alcanzar los 2.130,24 millones de euros.
Sin embargo, España perdió dos puestos como cliente de Brasil y pasó a ser el decimoséptimo destino de exportación del país que dirige Lula.
Por lo tanto, España se sitúa muy lejos de Estados Unidos y Argentina, que el pasado año se consolidaron como los mayores clientes y proveedores del país amazónico, una tendencia que ha cambiado ligeramente en el primer trimestre de 2007, durante el que China ha arrebatado el segundo puesto a Argentina en el mercado importador, según la Oficina Comercial española en Brasilia.
La visita del dirigente brasileño también servirá para presentar el Programa de Aceleración del Crecimiento (PAC), impulsado por el Gobierno de Lula el pasado enero y que proyecta inversiones en infraestructuras por valor de 200.000 millones de euros provenientes del Estado brasileño y del sector privado entre 2007 y 2010 para impulsar el crecimiento del país.
Las inversiones se centrarán en los sectores de transportes, logística, energía, saneamiento y habitación, aquellos en los que España es "más competitiva" y en los que tiene presencia en Brasil, asegura una nota de la CEOE.
Según datos del Gobierno español, actualmente España es el segundo mayor inversor extranjero en Brasil, con una inversión acumulada de 13.488,99 millones de euros entre el año 2000 y 2006.
Por su parte, la inversión brasileña en España tradicionalmente era "inexistente", comenzó a recuperarse en 2006 y hasta septiembre superó los 150 millones de euros, asegura el departamento que dirige Joan Clos.
Respecto a las oportunidades de inversión que ofrece Brasil para las empresas españolas, Industria señala que Brasil es un país estratégico para España que ofrece un "sinnúmero" de perspectivas, amparadas en el "compromiso" que Lula tiene con la estabilidad macroeconómica del quinto país más extenso y poblado del mundo.
Así, los sectores de ingeniería, construcción, medio ambiente, y agroalimentario ofrecen grandes oportunidades de negocio para las compañías españolas.
Industria destaca que el idioma castellano tiene "claras posibilidades" de expandirse en Brasil, país integrado en Mercosur -donde es el idioma hablado por excelencia- y donde se imparte en la enseñanza media, si bien matiza que es un mercado difícil por el limitado poder adquisitivo medio de la población.
En cualquier caso, el departamento que dirige Joan Clos destaca que Brasil conoce ya las capacidades del mercado español, con quien mantiene relaciones comerciales "muy relevantes", especialmente desde la Expotecnia celebrada en Sao Paulo en 1996.
De hecho, esta tendencia se ha consolidado y en los seis primeros meses de este año, las exportaciones españolas a Brasil aumentaron el 58,4 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior, hasta alcanzar los 141,7 millones de euros, mientras que las exportaciones aumentaron el 22,7 por ciento en tasa interanual y sumaron los 224,5 millones de euros.
Los productos españoles con más éxito en Brasil fueron, en 2006, los productos manufacturados, especialmente los componentes de aeronaves y los bienes de equipo, sobre todo, la maquinaria específica.
Por su parte, las importaciones brasileñas que más interesan a España son los productos semimanufacturados, los productos industriales y los básicos. EFECOM
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