Shanghai, 17 jul (EFECOM).- La multinacional japonesa del motor Honda se convertirá en la primera empresa automotriz extranjera en desarrollar su propia marca china, que será independiente de su sello internacional, y que pondrá en marcha junto con sus socios locales, informó hoy la prensa china.
Guangzhou Honda, la compañía mixta de la firma japonesa junto con el Grupo del Automóvil de Cantón (que controla a su vez la china Denway Motors), anunciará esta semana sus planes para la creación de esta nueva marcha china, según reveló el diario "South China Morning Post" citando tres fuentes vinculadas con el proyecto.
Para comenzar, Guangzhou Honda, que fabrica en China, para el mercado local -el segundo mayor del planeta, tras los Estados Unidos-, sus modelos Accord, Fit, Odyssey y City, establecerá una filial de investigación y desarrollo que se hará cargo de las fases iniciales del proyecto, según una de las fuentes, no identificadas.
Aunque se desconoce la cuantía de la inversión necesaria, otra de las fuentes señaló que la cifra superará a los fondos empleados hasta la fecha en cualquier iniciativa de desarrollo de una marca china, aunque Honda se negó a comentar por ahora todas estas afirmaciones.
Después de producir vehículos de marcas extranjeras, en asociación con multinacionales, muchos fabricantes chinos están empezando a centrar su estrategia en el desarrollo de marcas propias, con la intención de llegar a consolidarlas en el mercado internacional como hicieron antes otras firmas japonesas y coreanas.
La Corporación Industrial del Automóvil de Shanghai (SAIC, en inglés), el mayor fabricante chino, produjo durante años cientos de miles de modelos Buick y Santana (dentro de sus empresas mixtas, respectivamente, con General Motors y Volkswagen), y recientemente invirtió al menos 1.710 millones de dólares en su propia marca.
Con los derechos que compró a la extinta fabricante británica Rover, el año pasado SAIC lanzó al mercado su marca Roewe ("Rongwei", en mandarín), que hasta ahora ha puesto a la venta un modelo, el Roewe 750C, que constituye la versión china, incluso con un nombre que suena parecido en inglés, del antiguo Rover 75.
Por su parte, la pequinesa First Automotive Works (FAW), socia también de Volkswagen, planea invertir 13.000 millones de yuanes (1.250 millones de euros, 1.720 millones de dólares) durante los próximos ocho años en el desarrollo de su propia marca.
Dongfeng Motor, asociada también a la propia Honda y a la francesa Peugeot Citroen, está preparando una estrategia similar.
Sólo el año pasado se vendieron en China 5,18 millones de vehículos, un 30 por ciento más que en 2005. EFECOM
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