Bruselas, 21 mar (EFECOM).- El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, recalcó hoy la persistencia de riesgos inflacionistas a medio plazo en la zona euro y, en ese contexto, consideró "crucial" que los incrementos salariales tengan en cuenta el elevado desempleo y la evolución de la productividad.
Ante la comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo, Trichet explicó que la decisión de la junta de Gobierno del BCE del pasado 8 de marzo de subir los tipos de interés hasta el 3,75 por ciento contribuye a mantener las expectativas de inflación "firmemente ancladas a niveles consistentes con la estabilidad de precios".
El presidente de la autoridad monetaria europea destacó la fortaleza del crecimiento en la eurozona y opinó que se dan las condiciones para que la actividad continúe aumentando de manera sólida.
A su juicio, la demanda interna seguirá fuerte, gracias al dinamismo de la inversión y también del consumo, que se verá impulsado, por su parte, por las positivas expectativas para el mercado laboral.
Trichet admitió que existen ciertos riesgos para esa previsión, vinculados a posibles subidas del precio del petróleo, pero también a las tentaciones proteccionistas y a un hipotético ajuste brusco de los desequilibrios de la economía global.
Respecto a la evolución de la inflación y al papel de la negociación salarial en ese ámbito, el presidente del BCE hizo hincapié en la alta tasa de paro que todavía registran algunos países de la moneda única y se mostró en contra especialmente de elevar el salario mínimo, porque no contribuye a la creación de empleo.
Trichet también se refirió a los problemas que está teniendo la economía estadounidense por la evolución del mercado hipotecario y consideró improbable que una situación similar pueda producirse en Europa.
Incidió en que en los últimos meses se ha producido "cierta moderación" en el aumento del crédito para compra de vivienda, lo que está contribuyendo a "enfriar" el sector inmobiliario en aquellos países que habían registrado aumentos de precios más acusados.
Por último, rechazó, una vez más, las críticas procedentes sobre todo de políticos franceses a la política monetaria aplicada por el BCE e hizo hincapié en la independencia de la institución y recordó que, según los tratados comunitarios, su tarea consiste en garantizar la estabilidad de precios. EFECOM
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