
Hace siete años, el Atlético de Madrid estaba en el peor momento de su ya centenaria historia deportiva. Había bajado a Segunda División y todas las alarmas se encendieron en el club. Dos años más tarde, el equipo de la Ribera del Manzanares volvió a la élite del fútbol.
La desagradable experiencia también tuvo su lado positivo: el club se dio cuenta de la fidelidad de sus incondicionales socios. La mayoría de ellos renovaron su abono durante la dura travesía por la categoría de plata del fútbol español: casi sin querer, se había descubierto el potencial de la marca Atlético de Madrid.
Entre los grandes
Y es que el tercer club de España por prestigio y número de títulos calcula que cuenta con más de dos millones de seguidores y seiscientas peñas, un activo que en el mundo de la publicidad es un tesoro. Y el Atlético de Madrid se ha dado cuenta: "El gran potencial de nuestra marca nos ayudará a duplicar los ingresos en dos años", señalaba ayer Miguel Ángel Gil Marín, consejero delegado del club. Así, el equipo pasará de los 80 millones de euros que factura ahora a los 160 millones de euros.
El sentimiento rojiblanco lleva años siendo una realidad. Campañas publicitarias con célebres lemas como Un añito en el infierno o Papá, ¿por qué somos del Atlético? demuestran el tirón que tiene el equipo. Pero esa realidad nunca ha sido cuantificada ni estudiada a fondo. Para salir de dudas, el equipo madrileño encargó a la firma Young & Rubicam Brands un estudio sobre su marca.
Cae simpático y es neutral
Y las conclusiones han sido muy optimistas. "Sabíamos que éramos una marca con gran carisma y potencial, pero el estudio nos ha sorprendido gratamente", explica entusiasmado Miguel Ángel Gil. "Se trata de una marca única, distintiva y diferente. Además, el Atlético de Madrid es un equipo muy familiar entre los españoles", añade. Es lo que los expertos denominan marca neutra y de lo que no pueden presumir todos los equipos (el Real Madrid, por ejemplo, despierta antipatía en muchas ciudades de España). El Atlético es simpático y supera los localismos, un valor muy apreciado por los anunciantes.
En la actualidad, tiene media docena de patrocinadores, entre los que se encuentran Coca-Cola, Nike, Kia, Mahou y Viajes El Corte Inglés. Con este estudio, espera localizar nuevos anunciantes y, según Young & Rubicam, los sectores en los que el equipo colchonero puede tener mejor pegada son los de las nuevas tecnologías, telefonía, transporte aéreo, energía, servicios financieros y automoción.
Competencia desleal
Miguel Ángel Gil justifica la obsesión por la marca argumentando que el fútbol es uno de los negocios donde más competencia desleal existe. El directivo rojiblanco recuerda que los equipos de Primera División, por ejemplo, tiene diferentes regímenes fiscales dependiendo de su Comunidad Autónoma. Si a este contratiempo se suma que cada organismo deportivo defiende sus propios intereses, la limitación de este negocio es alarmante. Pero esto no es todo. "Además de Presidencia, hay otros cinco Ministerios que intervienen en el fútbol y limitan la explotación en este deporte", considera el consejero delegado. La única manera de conseguir unos ingresos recurrentes es profesionalizar la gestión y rentabilizarla. Y una de las claves es no desprenderse del patrimonio: "Si nos vamos del Vicente Calderón, el nuevo estadio siempre será de nuestra propiedad".