Madrid, 8 feb (EFECOM).- El ministro de Industria, Joan Clos, aseguró hoy que el Gobierno estudia y se interesa por los problemas para los fabricantes de automóviles derivados de la posible aplicación de la propuesta de la Comisión Europea que obligaría a partir del 2012 a reducir un 25% las emisiones de C02.
Clos se mostró partidario de la propuesta europea ("nuestro objetivo es reducir la contaminación", dijo), pero puntualizó que se deben tener en cuenta las peculiaridades del sector.
Agregó que el problema al que se enfrenta la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) es que España fabrica coches de baja cilindrada y la reducción de emisiones de dióxido de carbono (CO2) podría rebajar aún más la potencia.
Las nuevas exigencias medioambientales podrían, por tanto, incidir en el volumen de ventas de coches.
Clos hizo estas declaraciones durante la presentación de las nuevas medidas que el Ejecutivo quiere poner en marcha este año para desarrollar el Plan de Acción de Estrategia de ahorro y eficiencia energético.
Por otra parte, Anfac aseguró ayer, miércoles, a EFE que las medidas europeas para reducir los gases contaminantes en los coches son "complicadas y complejas", ya que entre otras cosas supondrían un sobrecoste medio de 3.000 euros en la fabricación de cada vehículo. EFECOM
apc/rdm/jla
Relacionados
- Economía/Motor.- Clos dice que negociará con la CE para que la reducción de emisiones no repercuta a la industria
- CE decidirá semana próxima si hace obligatoria reducción emisiones CO2 coches
- Economía/Motor.- Merkel se opone a la reducción de emisiones de CO2 en los coches que propone la Unión Europea
- CE pide recorte 20% de emisiones en 2020 y reducción dependencia energética
- UE propone reducción del 20% en emisiones de CO2 hasta 2020