Prisa atraviesa un período "extremadamente difícil" y quiere reducir los salarios de sus empleados, ha declarado hoy su director general, Juan Luis Cebrián. En diciembre, Prisa anunció la congelación de los salarios superiores a 80.000 euros brutos anuales. Ahora propondrá a los trabajadores que ganan más de 100.000 euros brutos al año una bajada de los salarios del 8%.
Juan Luis Cebrián indicó a los accionistas que Prisa (PRS.MC), con una gran deuda y afectado por una crisis que ha hecho bajar considerablemente sus ingresos publicitarios, atraviesa "una situación difícil, (...) extremadamente difícil, pero no es ni desesperada ni caótica".
Pero sobre todo, "pretendemos negociar con los representantes sindicales reducciones similares para los trabajadores sujetos a convenio, a cambio de una disminución en la jornada laboral", declaró Cebrián.
No habrá dividendos
Cebrián dio otra mala noticia a los accionistas: el grupo prevé no repartir dividendos hasta al menos 2010. "Hemos acordado con nuestros bancos acreedores que la política de reparto de dividendos sólo se volverá a producir cuando se estabilice el balance consolidado del grupo en un nivel de deuda no superior a tres veces y media el Ebitda (resultado bruto de explotación, ndlr) generado", explicó.
"Esto no se producirá desde luego antes del ejercicio 2010 y, con mayor probabilidad, del de 2011", precisó. La deuda de Prisa es de unos 5.000 millones de euros y el grupo lucha por gestionarla. Su beneficio neto en 2008 cayó más de un 50% debido al coste creciente de su deuda y la reducción de sus ingresos publicitarios.