Elon Musk da el paso y lanza una OPA hostil sobre Twitter en lo que considera su "mejor y última oferta". En una carta remitida a la empresa, Musk plantea una oferta en efectivo de unos 43.000 millones de dólares (más de 39.600 millones de euros) para hacerse con el 100% de la red social, o 54,20 dólares por acción. Supone una prima de más del 18% si se compara con el precio de cierre de ayer. Su idea es excluirla de bolsa y de no salir adelante, el controvertido empresario amenaza con "reexaminar su posición de accionista".
"Invertí en Twitter porque creo en el potencial de ser la plataforma para la libertad de expresión en todo el mundo y creo que la libertad de expresión es un imperativo social para una democracia funcional. Sin embargo, desde que hice mi inversión me he dado cuenta de que la empresa no prosperará ni servirá para este imperativo social en su forma actual. Twitter necesita transformarse en una empresa no cotizada" reza la carta enviada por Musk a Bret Taylor, presidente de Twitter. Posteriormente lo han remitido a la SEC, el regular estadounidense.
Daniel Ives, analista de Wedbush Securities, una firma de gestión de inversiones y patrimonio, ha asegurado a la CNBC que hay pocas posibilidades de que Twitter rechace la oferta. "Esto pone a Twitter contra la pared... realmente no hay forma de que Twitter, en mi opinión, pueda rechazar esto", indicó.
Musk tiene efectivo de sobra para llevar a cabo esta operación. Según el índice de multimillonarios de Bloomberg, tiene una fortuna de 260.000 millones. La red social vale en el mercado en torno a 37.000 millones. "Twitter tiene un potencial extraordinario. Yo lo desbloquearé", ha zanjado.
El empresario, de 50 años, desveló por primera vez una participación de 9,2% el pasado 4 de abril tras haber comprado 73,1 millones de acciones, logró convertirse en su principal accionista y luego aceptó unirse a la junta directiva de la compañía, un movimiento que se revirtió rápidamente en cuestión de días.
Desde entonces, el también dueño de Tesla se ha convertido en una presencia un tanto extraña en la red social. No ha escondido en ningún momento cómo le gustaría que fuese Twitter llegando incluso a plantear a sus seguidores si la sede de la empresa en San Francisco debería ser convertida en un refugio para personas sin hogar.
También sacó el eterno debate de si Twitter debería dejar editar los tuits. Una demanda muy solicitada por los usuarios y que al final ha cuajado dentro de la empresa, aunque lo cierto es que los directivos ya lo llevaban estudiando antes de la incursión de Musk.
we are working on an edit button
— Twitter (@Twitter) April 1, 2022
Sin embargo, su máxima preocupación es la que concierne a la libertad de expresión. No es la primera vez que ha criticado este punto, incluso a través de una encuesta que decía que "la libertad de expresión es esencial para una democracia funcional" y preguntaba a sus followers si creían que Twitter se adhería a este principio. Los resultados finales reflejaron que un 70,4% de los usuarios votaron que no.
Free speech is essential to a functioning democracy.
— Elon Musk (@elonmusk) March 25, 2022
Do you believe Twitter rigorously adheres to this principle?
A modo de nota humorística, algunos han asociado el precio de la oferta -54,20 dólares- al número asociado con el consumo de marihuana -420-. Cuenta la leyenda que, allá por el 1971, un grupo de amigos del instituto se encontró un mapa dibujado a mano en el supuestamente señalaba un cultivo de marihuana en Point Reyes.
La pandilla, recoge un reportaje de TVE, decidió ir en busca de aquel preciado "tesoro" y quedaron a las 4.20h, justo cuando terminaban las clases. Aunque estos cinco chicos nunca llegaron a encontrar dicho cultivo, sí hicieron historia a través del número.
Empezaron a utilizar el 420 y su popularidad se fue extendiendo paulatinamente. Poco a poco, los amigos de sus amigos fueron incorporando el término a su vocabulario, hasta que le llegó a la banda de rock Grateful Dead, que marcó un antes y un después. Desde entonces, es frecuente la vinculación entre la cifra y el cannabis. De hecho, han robado tantas veces la señal que marca las 420 millas de la autopista interestatal de Colorado, que han tenido que cambiarla por otra que marca tan solo 419,99 millas.