La presidenta del Banco Santander, Ana Botín, ganó 11,435 millones de euros en 2021 y el consejero delegado, José Antonio Álvarez, un total de 9,16 millones.
Las cuantías son muy superiores a los 6,8 y 6,01 millones que habían percibido el ejercicio previo porque en 2020 renunciaron al 50% de su remuneración total al no cobrar el bonus o retribución variable de forma voluntaria por el Covid.
El banco había acusado entonces unas pérdidas de 8.000 millones por los saneamientos ligados a la situación creada por la pandemia y el consejo ajustó las métricas para abonar el bonus al 67,3%, destinando el resto al fondo que creó la entidad para apoyar iniciativas de lucha contra el Covid.
Al comparar los ingresos de ambos ejecutivos con 2019, el sueldo de la banquera sube un 15% y un 11% en el caso de su 'número dos'.
Los ingresos de ambos ejecutivos incluyen el mismo salario de 2020 y el bonus devengado, donde un 40% lo ingresará este ejercicio 2022 y el 60% restante entre 2023 y 2024.
Si para el cálculo de sus emolumentos se utilizan los criterios de CNMV, donde se incluye la parte diferida que devengó en 2017 pero percibió en 2021, los ingresos de Botín escalan a 12,28 millones desde los 11,43 millones apuntados.
Con el mismo criterio, la nómina del consejero delegado asciende a 9,728 millones.
El consejo en su conjunto cobró 26,69 millones de euros, lo que supone un 2% menos que en 2019. En todo caso, la retribución total de los consejeros ejecutivos representó un 0,27% del beneficio ordinario del Grupo, un 44% de lo que suponía en 2013.
El incremento de las retribuciones compara con el aumento logrado en beneficios, donde la cifra se incrementó un 24,6% entre 2019 y 2021, cuando ganó 8.654 millones.
