El sector turístico cerró 2021 con un volumen de actividad de 88.546 millones de euros en España, lo que representa un 7,4% del Producto Interior Bruto (PIB) nacional. Supone un crecimiento del 68,5% con respecto a los 52.539 millones de 2020, cuando su peso en la economía española se situó en el 5,5%. A pesar del fuerte impulso del turismo durante el pasado ejercicio, aún se halla un 42,8% por debajo de la cifra de 2019, cuando marcó su récord con 154.738 millones (12,4% del PIB), y se retrotrae hasta los niveles del año 2003, según las estimaciones de Exceltur, organización que engloba a 32 grandes grupos empresariales.
Para 2022, la expectativa es que continúe la recuperación con un incremento del PIB turístico del 52,9%, hasta alcanzar los 135.461 millones de euros, equivalentes, según las proyecciones de Exceltur, al 10,5% del PIB. Son casi 47.000 millones de crecimiento que provendrán mayoritariamente del alza del turismo internacional y muy especialmente a partir del segundo trimestre, una vez se superen los mayores impactos por la variante de coronavirus ómicron. En concreto, la aportación de los visitantes extranjeros se duplicará desde los alrededor de 34.000 millones en 2021, cuando España recibió a 31 millones de turistas internacionales, al entorno de los 68.000 millones en el presente ejercicio. Mientras, el turismo nacional proseguirá con su remontada y pasará de 46.000 millones a 54.000 millones.
El PIB turístico no recuperará los niveles prepandémicos hasta el segundo semestre de 2023
Las previsiones de Exceltur, sustentadas en una encuesta a más de 2.000 empresarios, es que el PIB turístico no recuperará los niveles prepandémicos hasta el segundo semestre de 2023. No en vano, los 135.461 millones estimados para 2022 aún representarán un 12,5% menos (19.277 millones) que el nivel de 2019.
En cuanto al empleo, la organización que lidera José Luis Zoreda destaca que el turístico ha resistido mejor que la actividad, de manera que en diciembre registró una caída del 7,1% con respecto al mismo mes de 2019, frente al -24,7% del PIB turístico. Durante el último ejercicio el descenso medio del empleo turístico fue del 23,8%, frente al del 42,8% de la actividad del sector. En total, la cifra de personal afectado al cierre de 2021 ascendía a 135.000 personas, De ellas, 57.000 se encontraban en situación de Erte (Expediente de Regulación de Empleo Temporal) y 78.000 se corresponden con la menor afiliación a la Seguridad Social.
Zoreda ha demandado la extensión de los Ertes vinculados al Covid-19 hasta finales de 2022 dadas las incertidumbres que aún pesan sobre el sector turístico –su vigencia concluye en marzo–. De hecho, el representante de la organización incidió en los "problemas de tesorería" que se han reavivado en muchas empresas en las últimas semanas como consecuencia de la sexta ola por ómicron. En este contexto, la industria turística también reclama un nuevo plan de ayudas directas, así como el alargamiento de los vencimientos de los créditos ICO –las primeras amortizaciones llegan en marzo–.
Con una visión a más largo plazo, Exceltur pide clarificar cuestiones con la reforma laboral relacionadas con la contabilidad de la antigüedad de los fijos discontinuos y la definición del puesto de trabajo en relación con el trabajador en los nuevos contratos temporales, entre otras. Asimismo, abogan por reorientar las nuevas convocatorias de los Fondos Next Generation tras el reparto territorial efectuado en "proyectos de escaso poder transformador y en lugares con reducida oferta turística", de manera que apuesta por reducir el número de municipios beneficiados. Y, de igual modo, solicita que se impulse un Perte (Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica) para el turismo por un importe que podría alcanzar los 15.000 millones en 10 años, con una parte "muy importante" de los fondos europeos en los tres primeros años.