
Las empresas logísticas esperan un fin de año de infarto. Las compañías del sector de los envíos ya calculan que el cierre de ejercicio volverá a marcar nuevos récords con la campaña de Navidad y el Black Friday a la vuelta de la esquina. Uno, la patronal del sector, calcula que las empresas de reparto gestionarán un 7% más de envíos que el pasado año para atender los picos de demanda que se registrarán en estas fechas. Todo ello supondrá superar los 106 millones de envíos durante este periodo.
"Este año se espera alcanzar la mayor cifra de ventas online nunca antes vista durante la campaña del Black Friday y de Navidad", afirmó Francisco Aranda, presidente de la patronal, durante una jornada celebrada este martes bajo el nombre La logística en los picos de demanda derivados del ecommerce. En su opinión, cumplir con estas previsiones es todo un reto que "requiere un trabajo espectacular y una inversión en tecnología y capital humano de las empresas de lo que podemos estar todos muy orgullosos", concretó.
Y este reto es especialmente duro este año cuando el sector de la logística y la industria en general está sufriendo una crisis de suministros que tiene en vilo a la economía mundial. La escasez de contenedores, unida a los elevados precios de los fletes o la ultradependencia de China, supondrá una baja oferta de determinados productos que choca con una elevada demanda de los mismos. Esto, en opinión de Aranda, "conllevará un aumento de los precios que probablemente repercutirá directamente en el consumidor y, por ende, en el impulso de compra".
Para evitar la concentración de las compras en los días clave, las marcas están adelantando lo máximo posible la campaña navideña, tratando de garantizar que el volumen de trabajo esté repartido y no se concentre solo en los días de mayor actividad. Pese a ello, desde la patronal calculan que se podrán llegar a alcanzar picos de 5 millones de pedidos diarios en jornadas inmediatamente posteriores a las de las ofertas del Black Friday, como el 30 de noviembre o el 1 de diciembre.
En el lado de las empresas, llevan meses preparando esta campaña, más si cabe de lo habitual como consecuencia de los problemas que han surgido en el sector.
Los fletes triplican su precio
Uno de los grandes problemas del sector es el precio de los fletes marítimos. Las empresas han denunciado esta situación señalando que, tanto en el caso de los contenedores que vienen de China a Europa como en aquellos que vienen de Latinoamérica, el precio ha pasado desde los 4.000 dólares de hace un año hasta más de 14.000 en los que se encuentra habitualmente. "El año pasado el coste del flete era de entre el 10 y el 15% del del producto, este año es exactamente el mismo precio que el de lo que traemos", señaló durante la jornada de la patronal Ginés David Martínez, director de logística de Pikolin.
"El objetivo es abastecernos de productos y estar más cerca de los productores europeos para intentar evitar los fletes de China", señaló Luis Miguel Rivas, sourcing developer de Ikea Ibérica.