
Todo apunta a que los años dorados de la televisión española son cosa del pasado. Las dos crisis económicas que ha vivido el país en los últimos 10 años sumadas al auge de los canales de streaming han dejado a los principales grupos audiovisuales en una situación muy delicada. Tanto, que las previsiones apuntan a que no volverán a recuperar los beneficios obtenidos antes de la pandemia de Covid-19.
Atresmedia y Mediaset cerraron 2019 con unas ganancias netas de 329 millones de euros (118 millones la dueña de Antena 3 y 211 millones la propietaria de Telecinco), un 14% más que en 2018. Según las previsiones del consenso de analistas que las sigue en FactSet no volverán a ver estas ganancias, al menos, en los próximos cinco años. Si todo va según lo previsto se embolsarán en 2021 casi 296 millones de euros, un 10% menos que las cifras registradas en 2019, antes de la pandemia. La parte positiva es que supondrá casi un 42% más que en 2020.
Será en 2022 cuando más se acerquen a los niveles previos al Covid. Entre las dos ganarán más de 318 millones, tan solo un 2,3% por debajo del beneficio de 2019. Las ganancias de Atresmedia se acercarán a los 112 millones, un 4,8% menos que el año previo a la pandemia, mientras que en Mediaset serán de 206 millones, un 2,3% menos.
Más a largo plazo las previsiones no son buenas, de hecho, los beneficios empezarán a descender a partir de 2023. Atresmedia ganará cerca de 113 millones, apenas un 1% más que en 2022, mientras que la caída en las ganancias ya se empezará a notar en Mediaset, que verá cómo su beneficio se recorta un 1,1%.
El mal momento de las teles tradicionales no solo se debe a la crisis que ha azotado al sector de la publicidad en los últimos meses, el auge de los canales de streaming tampoco está jugando a su favor. Netflix más allá de verse perjudicada por la pandemia, ha salido reforzada. La creadora de Stranger Things ha registrado los mejores beneficios de su historia en el último año, y no solo eso, ha conseguido también ganar suscriptores a una velocidad récord, aunque hay quien apunta a que este crecimiento es insostenible en el tiempo.
Para poder hacer frente al gigante del streaming, tanto Mediaset como Atresmedia han lanzado en los últimos años sus propios canales de transmisión online, y con bastante éxito, aunque con muchas diferencias entre ambos. Atresplayer Premium lidera el mercado con 437.000 suscriptores entre enero y junio, según se desprende del último informe de resultados publicado por la compañía, lo que supone un incremento del 73% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Mientras que MiTele Plus registra un promedio mensual entre enero y junio de 189.000 suscriptores, un 33% más que en comparación a los 142.000 de 2020. A pesar de que ambas experimentan un notable crecimiento a raíz de la pandemia están todavía muy lejos de alcanzar a Netflix, que en 2020 registraba cerca de cuatro millones de suscriptores solo en España.
La preferencia por Netflix va más allá de su plataforma. Desde su llegada a España en octubre de 2015 sus acciones no han parado de subir en bolsa hasta cotizar prácticamente en máximos históricos, todo lo contrario a lo que ocurre con Atresmedia y Mediaset (ver gráfico). La primera desciende desde entonces cerca de un 67%, mientras que la segunda lo hace un 46%.