
A consecuencia de la ruptura de las relaciones diplomáticas entre Argelia y Marruecos, el gobierno argelino ha anunciado que a partir de otoño dejará de canalizar el gas que exporta a Europa a través del gasoducto Magreb-Europa. En su lugar, utilizará el gasoducto Medgaz, que une directamente España y Argelia a través del mar de Alborán, según publica el diario El País. El gobierno argelino ya ha asegurado que esto no afectara al suministro de gas a España en modo alguno.
Con esta decisión, Argelia muestra que no tiene intención de dar continuidad al acuerdo a tres bandas que habilita el gasoducto GME, el cual discurre por territorio marroquí y tiene capacidad para transportar más de 8.000 millones de metros cúbicos de gas natural a España y Portugal, más la cuota que corresponde a Marruecos. Por su parte, las autoridades marroquís han hecho público su deseo de renovar dicho acuerdo.
A pesar de la política de diversificación del Gobierno de España, Argelia sigue siendo uno de sus principales proveedores de gas natural, con una cuota de mercado del 29% en 2021. Por ese motivo, y viendo cómo se desarrollaban los acontecimientos en los últimos tiempos, España quiso asegurarse el suministro de gas natural y firmó el verano pasado un acuerdo con Argelia para aumentar de 8.000 a 10.000 millones de metros cúbicos la capacidad del gasoducto Medgaz. La inversión, estimada en casi 1.000 millones de euros, corrió a cargo de la argelina Sonatrach y la española Naturgy, compañías propietarias del gaseoducto.
La decisión afecta principalmente a Marruecos, que dejará de percibir un peaje del 7% del valor de la cantidad de gas natural exportado a través del gaseoducto Medgaz. En 2014, esa cantidad llegó a alcanzar los 200 millones de euros. Además, el gobierno marroquí tendrá que buscar alternativas para cubrir el 45% de la demanda de gas que, hasta ahora, conseguía a precio de saldo.
No obstante, se trata de una decisión que también perjudica, aunque en menor medida, a la propia Argelia. Con el fin del acuerdo a tres bandas, la capacidad de suministro de gas de Argelia a España disminuirá casi a la mitad y pasará a contar con una sola vía de salida. Esto, a su vez, implica que no podrán aumentar su cuota de mercado si se uno de sus competidores se ve forzado a interrumpir el suministro.