
La farmacéutica catalana Almirall ha recibido la aprobación de la FDA para un nuevo medicamento de su área dermatológica. El medicamento tiene unas ventas potenciales a nivel mundial de 250 millones de euros y la compañía ya trabaja en Europa para conseguir el sí de los reguladores en 2021.
La historia de este medicamento, con nombre comercial Klisyri, comenzó hace ahora tres años. Fue entonces cuando la farmacéutica catalana suscribió un acuerdo con la biotecnológica Athenex para la adquisición de esta molécula, por entonces en ensayos clínicos.
Tras hacer un pago inicial de hasta 55 millones de euros, la compañía americana se encargó de su desarrollo en Estados Unidos y Almirall en Europa. Tras el sí de la FDA, la comercialización pasará a manos totalmente de la firma española, si bien Athenex recibirá hasta 65 millones por hito.
El contrato también contemplaba el pago de royalties escalonados a partir del 15% en función de las ventas netas anuales, que se incrementarán en caso de conseguir mayores ingresos.